
Huevos a la vizcaína: homenaje a una cocinera ninguneada
Dolores Vedia de Uhagón redactó en 1873 la primera receta de salsa vizcaína, pero el mérito se lo llevó un señor que le copió. Preparamos unos huevos con su fórmula a modo de reivindicación.
Dolores Vedia de Uhagón redactó en 1873 la primera receta de salsa vizcaína, pero el mérito se lo llevó un señor que le copió. Preparamos unos huevos con su fórmula a modo de reivindicación.
Su nombre inglés quizá no te resulte muy apetitoso, pero si te decimos que la receta consiste en plátanos caramelizados y flambeados acompañados de helado, la cosa cambia, ¿verdad?
Las dos hortalizas ganan un extra en sabor, textura y color cuando las asas. Ya que está el horno encendido, metemos en los últimos minutos unos garbanzos especiados que rematan un plato de categoría.
Las albóndigas son una cumbre de la cocina española, pero freírlas puede ser un engorro. Los minihornos de convección permiten prepararlas sin dejar la cocina hecha un ecce homo.
Esta masa fina hecha a la sartén es la pariente suramericana de los crêpes franceses o las filloas gallegas. Es uno de los postres más típicos de los restaurantes argentinos, así que el relleno clásico está claro cuál es.
Con centeno no solo puedes hacer pan: también es ideal para elaborar en casa unas crepes con un sabor diferente al clásico. El relleno lo eliges tú, ya sea dulce o salado.
Puedes hacer esta receta con col blanca o lombarda, da igual, ambas combinan genial con los frutos secos garrapiñados picantes, el toque herbal del tomillo fresco y el cítrico de esta fruta.
Son primas hermanas, pero con diferencias en ingredientes y preparación: una lleva canela y harina, mientras la otra apuesta por la nata y la vainilla. El pastelero Miquel Guarro nos enseña a prepararlas.
El repollo tiene vida culinaria más allá del hervido o el rehogado que tanta mala fama le han granjeado. En esta receta salteamos y aderezamos esta verdura con especias orientales para que te enamores perdidamente de ella.
Originarios de Bari, en el sur de Italia, se llaman así porque pican con alegría. Su salsa sólo lleva tomate, guindilla y ajo, y la técnica de cocinado es completamente diferente a la habitual con la pasta.
Esponjosas, sabrosas y con una salsa densa y rica, esta receta nunca falla y se prepara en solo 30 minutos. Nosotros las hemos elaborado con langostinos y pescadilla, aunque puede servir cualquier otro pescado blanco.
Cambiamos el habitual vino de este estofado por cerveza, lo que nos dará una salsa de sabor más suave. Solo la engordaremos con el colágeno de la carne y un poco de cebolla, sin harinas ni maicena.
Las nueces pecanas son las únicas autóctonas de Norteamérica. Un cocinero estadounidense nos enseña la receta de la famosa tarta que se elabora con ellas, y la mejor noticia es que no requiere ningún esfuerzo.
Las judías llegaron al Palacio Real de La Granja de San Ildefonso en el siglo XVIII como comida para animales. Desde los años cincuenta, su variedad más rotunda y mantecosa es la protagonista de un potaje clásico segoviano.
El secreto de este plato está en la salsa, una bomba de umami del chef David Chang que adaptamos en versión suavizada para aliñar un plato fresco de verdura.
Este plato clásico del oriente andaluz y Murcia consiste en un sofrito de cebolla, ajo, pimiento y tomate con patatas, alguna proteína y, cómo no, los andrajos: jirones de masa de harina de trigo duro, agua y sal.
Los calçots y los 'sponsali' son familia de las cebollas y se recogen entre diciembre y finales de marzo. Ambas sirven tanto para la brasa como para rellenar una deliciosa masa, como en esta receta.
Las habas mandan en este plato, donde comparten protagonismo con aromáticas como la menta, panceta, butifarra y otros embutidos habituales en las recetas de tiempos de duro trabajo físico.
Dos platos sencillísimos y llenos de sabor que combinan unas patatas crujientes y bien aliñadas con una crema que podría servir también como salsa para pasta. Mejor, imposible.
El nombre de este postre típico de las islas Canarias no puede estar mejor puesto: está muy bueno, y además se puede preparar en casa sin mucha dificultad. Otra razón más para irse allí a vivir.
Las alcachofas combinan a la perfección con el jamón, y por eso no es extraño que el plato que los junta sea tan popular. Damos una vuelta a la fórmula de siempre para adaptarla al presente.
Esta sencilla receta está dedicada a los amantes del queso, del picante y de los sabores fuertes. Y lo que es mejor: además calmará el frío que se te ha quedado en el cuerpo.
Con su masa de almendra y su relleno de nata o trufa, los marinos son uno de los dulces más típicos de Zaragoza. La receta lleva su trabajo, pero cuando le des un bocado a uno sabrás que ha merecido la pena el esfuerzo.
Las bolas de arroz rellenas y fritas, originarias de Sicilia, se encuentran en puestos de comida rápida de toda Italia. Hoy te enseñamos a hacerlas rellenas de dos ingredientes que combinan requetebién.
Su nombre viene de tiempos de escasez en los que la comida ligera no estaba muy bien vista, pero el ‘matamaríos’ o guiso en blanco es la sopita suave y reconfortante que necesitamos en 2023.
Usamos el calabacín como envoltorio para un relleno de queso y espinacas. Una vez hechos, los paquetitos de esta receta se estofan en una salsa de tomate casera.
Estos pasteles son primos hermanos de los 'cinnamon rolls', y como tal no son exactamente iguales: en lugar del clásico glaseado blanco, se hornean encima de toffee mezclado con miel y nueces pecanas.
Si creías que habíamos explorado ya todas las versiones de la ensaladilla de patata y mayonesa, esta receta con pulpo y piparras de AlNorte viene para decirte que, afortunadamente, te equivocas.
La receta ganadora de la 8ª edición del concurso Comidista Invitado la envía Juan Vicente Jiménez, que se lleva de premio un lote de productos gourmet. Es una sopa de las de toda vida, que calienta hasta el alma.
Se parecen a las crepes, pero en más fino, y pueden ser dulces o saladas. Alex Iglesias, del restaurante Cabanas en Lalín (Pontevedra), nos da una clase gratis para preparar este clásico del carnaval en Galicia.
Los risottos cargan con un estigma inmerecido: no son difíciles ni pesados de hacer. Lo demostramos en esta receta, en la que el toque de pesto se mezcla con la melosidad del arroz y el dulzor de la calabaza.
No nos la jugamos mucho suponiendo que van a gustarle a todo el mundo: son tortillas de maíz embadurnadas en una salsa roja de chiles no muy picante, rellenas de pollo deshilachado y queso fundido.
La gran fiesta de uno de los platos más famosos de Galicia se celebra este domingo. El restaurante La Molinera nos enseña su receta: si te da pereza prepararlo, también lo puedes comprar online.
Pasar unos cogollos de lechuga por la plancha a fuego alegre les da un sabor tostado sin perder frescura. La intensidad de las anchoas aporta profundidad y una vinagreta de tomate y cebolla lo rematan.
¿Identificas “legumbres” con “plato que me llevará horas digerir”? Prueba esta receta de judías sin grasaza de cerdo: el pimentón logra que no eches de menos el chorizo y la hierbabuena lo invade todo con su frescor.
Esta versión del popular plato, tan típico de Cádiz, aúna un jugoso lomo de atún conservado en grasa de cerdo ibérico especiada. Ligerito no es, pero merece la ocasión.
El almidón cumple su función en esta receta y consigue que este plato de pasta seca quede muy meloso, casi como un risotto. La mantequilla y el queso, que se añaden al final, ponen aún más suavidad.
¿”Hacer pasta en casa” significa “sufrimiento” si no tienes experiencia en la materia? No siempre. Hay recetas como los gnudi, una especie de ravioli sin envoltorio, que salen bien a la primera.
Una rica receta de bacalao con patatas y una completa historia del gusto de nuestros vecinos portugueses por el bacalao, un pescado que consumen más que nadie en Europa desde que suministraban sal a los vikingos.
Esta receta lo tiene todo: pocos ingredientes, menos trabajo y un resultado espectacular con una carne tierna y salsa melosa que pide pan, patatas o arroz para untar.
La pasta 'burro e parmigiano' tan extendida en Italia ya es perfecta en sí misma, pero aún puede alcanzar un grado más de excelencia si añadimos un ingrediente asiático: el miso blanco.
Tienen fama de trabajosos, pero no lo son tanto si pides que te los den limpios en la pescadería. Nuestra receta de 'txipis' es la tradicional, con algunos truquillos extra para potenciar el sabor. Y el placer.
Le damos una vuelta a las viejunas endivias al roquefort sacando la nata de la receta y cambiándola por vino dulce. También añadimos un toque de naranja para refrescar y nueces, que aportan resistencia al mordisco.
Una buena manera de integrar legumbres en la dieta de los más reticentes. Al triturarlas no solo darán textura a esta crema, sino que además se volverán más fáciles de digerir.
El pollo empanado es uno de los muchos platos apetecibles que elabora el protagonista de la serie de Disney+ en el Original Beef of Chicagoland, un bar de bocadillos que comienza a regentar tras la muerte de su hermano.
Se han hecho tan populares en las cafeterías de especialidad españolas que ya podrían empadronarse. Aquí tienes una receta para preparar estos dulces con cardamomo o canela de la forma más sencilla posible.
Los purés de verduras son fáciles, económicos y reconfortantes, y si los rematas con un toque crujiente se pueden transformar en un platazo. Éste lleva calabaza y zanahoria, pero se adapta a lo que tengas en la nevera.
En la región italiana de Puglia es un clásico preparar estos moluscos con un sofrito de ajo, cayena y tomate, al que se le añade perejil y mucha pimienta. Se pueden comer tal cual o empapar pan, pasta o arroz en la salsorra.
Las ensaladas no son solo para el verano, y lo demostramos con un receta que es puro invierno. Juntar remolacha, naranja y pomelo con la cremosidad del tofu hará que quieras que esta estación dure un mes más.
Esta sopa de pollo y verduras es hija de la carestía de alimentos que hubo en Estados Unidos en los años treinta. Las bolas de masa hechas con harina, algún lácteo y huevo son parte esencial de este plato.
Conseguir una masa finísima como el encaje no solo es posible si tienes ocho apellidos gallegos. Con una buena sartén y un poco de mañana puedes preparar uno de los postres gallegos más populares y deliciosos.
El condimento de origen japonés se utiliza por lo general en platos salados, pero en esta receta usamos su versión blanca para potenciar el sabor de una tarta con fruta.
La verdura cocida tiene fama de plato aburrido, pero si vigilas los tiempos de cocción y aderezas con gracia puede ser una cena fantástica. Aquí tienes consejos para dejarla al punto y tres salsas bien alegres.
La receta original consiste en un arroz pilaf, cocido en olla, con higadillos y menudillos de pollo, pero aquí te proponemos cambiar la casquería por unos buenos champiñones.
Una bechamel cremosa y trocitos de espinacas retozando alegremente en ella, con un fruto seco para dar enjundia al mordisco. Las pasas dan un punto de dulzura mientras un rebozado crujiente lo envuelve todo.