Concluyó una semana en la que llegó el turno de las declaraciones de los testigos propuestos por los abogados de los 12 acusados en el juicio del procés. Con un presidente del tribunal, Manuel Marchena, empleándose a fondo para evitar mítines políticos o clases de derecho comparado y unas defensas tratando de demostrar que tanto el 20 de septiembre como el 1 de octubre de 2017 ni los políticos instigaron a una rebelión en la calle ni los ciudadanos la llevaron a cabo.
Crónicas
- Junqueras estaba con el obispo, por Pablo Ordaz
- Un exdiputado de la CUP admite “muros humanos” el 1-O, por R. Rincón
- Marchena marca la pauta para los testigos de las defensas, por R. R.
Lo que no podemos permitir es que el juicio se convierta en una lección de un constitucionalista a los magistrados del Supremo
Manuel Marchena, al catedrático Enoch Alberti
Opinión
- Limpia, fija, da esplendor, por Xavier Vidal-Folch
Protagonistas
Manuel Marchena
El presidente del tribunal llevaba dos días con intervenciones muy duras. En la jornada 36 volvió a ser protagonista al abroncar a un testigo, que, en su opinión, intentó dar una clase de derecho comparado sobre autodeterminación. "Esto es un insulto a los miembros del tribunal", le espetó al catedrático Enoch Alberti.
No hay ni una sola estrategia de planificación violenta en ningún espacio soberanista de Cataluña el 1 de octubre
David Fernández, exdiputado de la CUP
Apuntes
... y Junqueras, con el obispo
Lluís Juncá, que fue director de la oficina de Junqueras cuando este era vicepresidente catalán, explicó que el político estaba comiendo con "el obispo" el 20-S, cuando se produjeron los registros en la Consejería de Economía y otras sedes institucionales por orden del juzgado que investiga los preparativos del 1-O.
Expulsión de la sala
Albert Boada, el exconcejal de Crida per Sabadell —una coalición de la que forma parte la CUP— en el municipio barcelonés, ha sido expulsado del juicio por llevar una camiseta en la que se podía leer en catalán "Libertad presos políticos".