La temporada en la que coinciden los guisantes y los trigueros es tan efímera como satisfactoria, así que cualquier excusa para juntarlos en un plato es buena (más si los Portobello se apuntan a la fiesta).
Una versión algo más elaborada –gracias al proceso de encurtido del apio, que puede hacerlo más atractivo para los apiofóbicos– de una ensalada simple, satisfactoria y muy fresca.
Encurtidos caseros exprés, langostinos bien aprovechados y una falsa salsa rosa –más fresca y ligera que la original– acompañan a las patatas que forman la base de esta ensalada con aires del Este.
Un plato completo y sabroso que se puede tomar perfectamente al aire libre y a temperatura ambiente, pariente del tabulé con pescado, rebosante de frescura e ingredientes primaverales.
Hacer la coliflor en la sartén es sencillísimo, y el tostado que se consigue con este método eleva su sabor a la estratosfera. Una salsa fresca a base de tomate y aderezos italianos le pone la guinda al plato.
La legumbre más rápida de cocinar y una buena cantidad de verdura de temporada son la base de una crema que puede tomarse caliente, fría o a temperatura ambiente. El quark y los picatostes le ponen la guinda.
Un estofado sencillo, rápido y sabroso, perfecto para estas noches en las que bajan las temperaturas y nos damos cuenta de que, a ciertas horas, la primavera son los padres. Al menos hasta dentro de un mes.
No hay que pelarlos, ni picarlos, ni casi cocinarlos. La verdura más fácil del año empieza su temporada, y aquí tienes tres maneras de tomarla que no te llevarán más de 15 minutos.
¿Sabías que las verduras también pueden beneficiarse de esta antiquísima técnica de cocción y conservación? Empieza con esta calabaza con alga kombu del restaurante Libertine y lánzate a descubrir nuevos sabores.
Nunca le echaríamos nata, nunca. Pero nos permitimos un 'crossover' con el aliño de la ensalada César para mejorar la receta clásica sin renunciar a la esencia.
Son fáciles de digerir. No tienen apenas grasa. Y son tan sabrosos que recuerdan al chorizo sin llevarlo. Descubre cómo obrar el milagro de un potaje de garbanzos ligero.
Dani Lechuga, a pesar de su vegetariano nombre, prepara algunos de los mejores platos de carne de la ciudad de Barcelona. Con la receta que le hemos mangado hoy, demuestra que los cefalópodos tampoco se le resisten.
Si no te gusta esta combinación de alcachofas, caldo vegetal, menta y pasta es que no tienes corazón (o que eres la reencarnación de Mafalda, en cuyo caso sería perfectamente comprensible).
¿Nunca te has atrevido con las masas porque te da miedo que se te peguen a las manos? Te aseguramos que esta no lo hace, y que además te va a hacer muy feliz con ingredientes sencillos, baratos y sabrosos.
De carne, de pescado de roca, de cebolla, la típica castellana o para enfermos. Tenemos las mejores recetas líquidas para reconfortarte cuando hace frío.
Le copiamos una técnica a Jamie Oliver para cocinar una coliflor entera, le damos un masaje con un aliño de hierbas y especias y la acompañamos de puerro y chirivía. Y luego nos lo comemos todo, claro.
Para brasear alcachofas no necesitas contarles tu vida: basta con saber pelarlas, cocerlas en vinazo y rematarlas con piñones, queso y aceitunas negras.
Queso azul, bulbos de invierno, cítricos y escarola, unidos y dispuestos a enseñarte quién manda en el mundo de las ensaladas. Tiene pinta de estar aún mejor acompañada de pan de centeno ligeramente tostado.
Sanas, saciantes, frescas y llenas de sabor: las ensaladas que harán del invierno un oasis vegetariano existen. El truco está en combinar verduras cocidas y vegetales crudos para conseguir contrastes.
Volvemos a apostar por el horno como herramienta para conseguir unas verduras sabrosas, caramelizadas y sin calorías añadidas. Una salsa de yogur y curry en polvo remata una jugada ganadora desde el minuto cero.
Si se puede mezclar la gastronomía de Texas y México o la de Japón y Perú, ¿por qué Francia y España no podemos cruzar dos de nuestras sopas más emblemáticas, baratas y deliciosas? El ajo y la cebolla están a favor.
Manzana y setas salteadas, frutos secos garrapiñados: pocos sabores y olores se llevan tan bien con los meses fríos como los que componen esta crema. Navideño, reconfortante, barato y de temporada: ¿qué más le puedes pedir a un plato?
Suma algas, gambones y una mayonesa de su coral: el resultado será la ensaladilla con más sabor a mar que hayas probado nunca. Un éxito asegurado en tus comidas –y cenas, y hasta meriendas– navideñas.
Una manera diferente de llevar a la mesa una de las carnes más socorridas durante las fiestas: el cordero. Nuestra versión se sirve con pasta y –pedazo de ventaja– está mejor de un día para otro.
Un festival vegetal perfecto para acompañar un asado, un pescado o un pollo, comer tal cual calientes o frías o solucionar de un solo golpe de horno la mitad de la ingesta de verduras de la semana.
Puede ser una delicia, y puede ser la sopa más sosainas del mundo: todo depende de cómo la hagas. Aquí tienes todas las pautas para alcanzar la cumbre cucurbitácea.
Berenjenas, lentejas y hojas de parra rellenas: el libro 'Cooking a Home' nos acerca historias de desplazados sirios a través de sus recetas más queridas.
Unos dados de patata cocida salteada y un puré cremoso de boniato son la base de un juego de texturas en el que también participan la cebolla y el pimiento. Todos ganan (pulpo incluido).