Gratén de calabaza y espinacas
Una buenísima manera de poner verduras en la mesa durante estas fiestas, con un gratinado que combina la suavidad de la ricota y la potencia del parmesano.
Una buenísima manera de poner verduras en la mesa durante estas fiestas, con un gratinado que combina la suavidad de la ricota y la potencia del parmesano.
Preparamos la versión roja de la sopa mexicana por excelencia, un cocido muy sustancioso que se enriquece con carne magra y se aliña con cilantro y una salsa de chiles moderadamente picante.
Un plato sencillo que contrarresta el dulzor del boniato de temporada con una sabrosa vinagreta. Puede servir como plato único apañado si aumentamos las cantidades y es apto para llevar en el táper.
Son un entrante o aperitivo estupendo, también se pueden elaborar con calabacín, coliflor, brócoli o col y son facilísimas de hacer. Y por si fuera poco, vienen con una salsa de yogur casera para chuparse hasta los codos.
La primera receta ganadora del concurso Comidista Invitado tira de ingredientes sencillos, pero suena de lo más apetecible. La enviaron Paula García y Raúl Contreras, y es de la abuela de este último.
Hay sopas con trozos de verduras más allá de la minestrone. Podemos adaptar este reconfortante plato a los ingredientes de otoño añadiendo setas, calabaza y boniato, que asaremos para potenciar su sabor.
En esta receta servimos los floretes de brócoli o bimi al vapor, sobre una crema preparada con las partes menos estéticas pero igual de sabrosas de la verdura.
El sabor anisado del hinojo combina perfectamente con el salado potente de las anchoas, mientras su punto yodado se viene arriba gracias a la mantequilla que impregna los picatostes.
Cebolla, ajo y laurel: no necesitas muchos más aderezos para marcarte una deliciosa sopa de garbanzos, pero si quieres darle un giro aún más interesante, hazte con un limón y disfruta a lo grande.
Después del sushi, el ramen es el plato japonés más omnipresente del mundo. Prepararlo en casa no exige mucho conocimiento, pero sí paciencia: el cocinero del restaurante Kobuta nos enseña una fórmula sencilla.
A la leña, a la brasa, al fogón o al horno, en sartén castañera o corriente y moliente: asar castañas en casa es fácil, y además de comerlas tal cual puedes preparar con ellas picoteos, cremas o postres.
El brócoli es un castigo... cuando lo recueces o no sabes sacarle partido. El chef del restaurante Cruix nos enseña técnicas para mimarlo y una receta que derriba todos los tópicos sobre esta verdura.
Hortalizadas cocinadas al horno o a la brasa y generosamente aliñadas: eso es la escalivada, una preparación que se puede tomar tal cual o usarla en tostadas, cremas, canelones o flanes salados.
Última hora: el calabacín se puede comer crudo. Este bombazo informativo nos da pie a preparar una ensalada de aires griegos, que funciona igual como entrante pintón que como plato para táper.
El melocotón aún está en temporada, y para festejarlo hemos elaborado un menú completo con él: una sopa fría, unas costillas de cerdo asadas y, para terminar, en una coca.
Las frutas y hortalizas más hidratantes del verano se alían en este plato ligero y refrescante, con el toque cítrico de la lima y el jengibre como potenciador del conjunto.
Aunque parece que el final del verano llegó, y los tomates partirán, todavía quedan buenos ejemplares que podemos convertir en ensaladas rápidas, saludables y muy sabrosas.
Si crees que las verduras al vapor son de régimen, te equivocas: esta técnica de cocción respeta su sabor como pocas. Para clavarlas sólo necesitas seguir unas normas sencillas y probar alguno de nuestros aliños.
Un plato sencillo y fresco a base de pepino y pulpo que podemos preparar con este cefalópodo crudo, cocido e incluso en lata. Un aliño alegre a base de vinagre, algas y sésamo lo hace aún más sabroso.
Las patatas cocidas son una base estupenda para tus ensaladas veraniegas, que puedes completar con verduras crudas o asadas, carnes, aves, legumbres, encurtidos o conservas y un sinfín de aliños.
Esta sopa de maíz, tomate y pimiento amarillos no solo es una explosión de color, sino también una opción refrescante para cuando el calor te quita el hambre.
Dicen que en los años setenta el cocinero Ramón Roteta fue el primero en rellenar pimientos del piquillo, esa variedad navarra tan sabrosa. Hemos hecho una versión menos señorial que la suya con gambas y merluza.
¿Quién dijo que en verano las legumbres sólo se pueden tomar en ensaladas o hummus? Nuestra sopa las presenta en versión líquida, reforzada con una guarnición de tomatitos, aceitunas y piparras.
El único calor que sentirás preparando estos platos de pasta es el de cocerla: nuestras salsas de tomate, de piquillos y de nueces se hacen en frío. También se pueden cocinar sin nada debajo del delantal.
Preparar en casa salmorejo no lleva más de cinco minutos. Además, puedes probar a hacer otras recetas diferentes a la clásica, como esta versión frutal con albaricoques.
Nuestros gazpachos de hoy no son ni tradicionales ni andaluces. Llevan cosas como melón, cerezas o sandía y manzana, para poner nerviosos a los puristas y hacer disfrutar al resto de la humanidad.
Unos lomos de sardina curados rápidamente en sal y azúcar, más un picadillo de encurtidos, harán de entrante perfecto para las reuniones ociosas, ya permitidas de nuevo.
Si no sueles comer remolacha, esta ensalada te reconciliará con ella. El cremoso aliño de yogur y hierbas, combinado con el huevo duro, consigue que el sabor de esta hortaliza se suavice considerablemente.
Una combinación fresca de patata y hortalizas veraniegas, que puede servir desde como hasta de plato único si se ilustra con huevo duro o alguna conserva de pescado.
Con el calor tanto el hambre como las ganas de cocinar bajan enteros, y las sopas frías solucionan ambas cosas. Hoy proponemos tres con tomate, tres con yogur y tres con patata.
La salsa ponzu combina a la perfección con la untuosidad del pesto y la del mismo aguacate. Este fruto a la brasa se puede convertir en la estrella de tus próximas barbacoas.
Probamos cuatro recetas de tortilla de patatas exprés: con microondas, con olla a presión, con puré de patata y con patatas chips. Una nos horroriza y dos nos dejan fríos, pero hay otra que nos entusiasma.
Una versión con menos caldo de un plato clásico tailandés llamado 'tom yum nam kon'. La podemos preparar en versión exprés o más elaborada, haciendo la pasta de curry en casa.
Esta ensalada combina el calabacín crudo con el cocido, el sabor potente de la rúcula, el crujiente de las avellanas. Y además llena de color tu mesa estos meses calurosos.
Este plato tailandés suele prepararse con carne picada, que hoy cambiamos por brócoli: su sabor es potente, cítrico y picante, perfecto para recibir al buen tiempo.
Desgranar habas o guisantes no es un trabajo complicado, y la recompensa supera con creces el esfuerzo. Este plato es una buena muestra de lo que pasa cuando juntas legumbres de temporada y embutido fresco.
¿Odias las espinacas? Nosotros también, pero sólo cuando están tristes y recocidas. Esta verdura tiene más posibilidades de las que piensas: si quieres reconciliarte con ella, prueba alguna de nuestras tres recetas.
Comparamos las recetas de lentejas estofadas de David Muñoz, José Andrés, Pepa Muñoz y Anna Terés. Unas son clásicas, y otras, veganas, rápidas o exóticas, pero solo una se lleva la medalla.
Probar la gastronomía local es obligado para cualquier trotamundos. Mientras llega la próxima aventura, estas sopas animan a viajar con el paladar
¿Qué hay más de estas fechas que unos espárragos verdes y unas buenas fresas? Nosotros hemos decidido juntarlos en un plato con un poco de queso de cabra, y el resultado es tan satisfactorio como primaveral.