Este vivo pueblo conocido por su festival de teatro ofrece más razones para visitarlo: un sorprendente paisaje donde el rojo del suelo contrasta con los campos de olivos y de pistachos y un monasterio convertido en parador en el que ver arte y ver pasar el tiempo
Habitual en Italia y Turquía, es lo último en cremas de frutos secos. Mercadona ha creado su propia versión dulce y viral, hay marcas que la venden sin azúcares añadidos y en las redes sociales proliferan los tutoriales para elaborarla
Las bolas de arroz rellenas y fritas, originarias de Sicilia, se encuentran en puestos de comida rápida de toda Italia. Hoy te enseñamos a hacerlas rellenas de dos ingredientes que combinan requetebién.
En el primer consultorio de 2023 hay dudas sobre almendras y pistachos, inquietudes por el arsénico de las bebidas de arroz y cuestionamientos de los Chocapic. Y también una sopa de paella “con ruido de la Rambla de Barcelona”.
El fruto seco más verde no solo se recolecta en Irán o Turquía: en Castilla-La Mancha su cultivo se ha extendido en la última década, y hoy protagoniza platos y postres de algunos de los mejores restaurantes de la zona.
Un investigador, José Francisco Couceiro, es el principal responsable de que el paisaje español haya cambiado: uno de cada 700 kilómetros cuadrados ya está cubierto por pistacheros
¿Quieres un postre resultón pero no te apetece ni currar ni encender un aparato que da calor y gasta mucha electricidad? Nuestro departamento de dulces para vagos, acalorados y ahorradores tiene la solución.
Los cogollos no solo pueden comerse en ensalada y con anchoas: cocinados a la plancha o brasa y acompañados de una buena vinagreta pueden darnos muchas alegrías.
Marisco, una plancha y una buena salsa a base de limón y aceite: si esta combinación ya te suena bien, añádele el toque aromático de la albahaca y unos pistachos. Ahí lo tienes, el verano hecho aperitivo.
Un taco de bacalao jugoso y al punto sobre un lecho de verduras especiadas y doradas, con una salsa verde que le aporta un toque fresco al conjunto: no te has muerto, pero te sentirás en el cielo.
La piña rellena es viejuna, sí. Y qué: eso no hace que pierda ni un ápice de molonidad y ricura. Rindamos un homenaje al postre exótico (y ochentero) por antonomasia con una versión fácil y sabrosa.