El albaricoque es una de las frutas que menos utilizamos para cocinar, y nos lo estamos perdiendo. Porque a mordiscos está muy rico, pero acompañado de tomate, feta y un aliño fresco directamente es la bomba.
Una base crujiente, un relleno cremoso y un tuneo adaptado al gusto del cocinero son los únicos secretos para que esta tarta salada se convierta en un auténtico manjar. En este vídeo te contamos cómo conseguirlo.
Ya es tarde para la operación bikini. Lo sabemos, y además no creemos en ella. Por eso proponemos esta receta, que rinde culto al chocolate, la galleta y el plátano. Sin remilgos, pero también sin comerse medio kilo.
Pasteles, batidos, mousses de chocolate, sopas frías, tartas sin horno o todo tipo de salsas y vinagretas: el aguacate ofrece muchas posibilidades más allá de ponerlo sobre pan y hacerle fotos cuquis en Instagram.
Pocas verduras necesitan tan poco como los espárragos para estar atómicas. Hoy los comeremos con ajos tiernos y cebada perlada, un cereal que tiene una textura parecida a la de la pasta.
Las has visto. Están en la nevera de casi todos los supermercados. Son dos masas muy parecidas pero con ligeras diferencias, sencillísimas de usar y con las que se pueden preparar platos y bocados dulces y salados.
No hay nada tan básico como una pizza Margarita, pero también puede ser una auténtica delicia si te lo curras con los ingredientes. Pocos, pero bien escogidos: ahí va la esencia de la cocina italiana.
Si a una ensalada fresca de verdura 'al dente' le añadimos una vinagreta sabrosa y colorida, aderezos y algo de pan crujiente, se monta una fiesta en el plato que no te querrás perder.
Si preparas el mismo plato con los tomates crudos, tendrías una ensalada de pasta. Pero nos quedamos con esta versión caliente, con los tomates jugosos y ligeramente caramelizados.
Las personas que no comen productos de origen animal suelen causar controversia. ¿Son tan plastas y fanáticos como los pintan? ¿O es que no nos hemos parado a escucharles? Los propios veganos se explican.
Si tú también has soñado con compartir una comida de Acción de Gracias con los personajes de la serie Friends, estás de suerte: hoy te enseñamos a preparar los macarrones con queso de Monica.
Damos un giro contemporáneo a un plato tradicional de Semana Santa, acortando la cocción de unas espinacas y cocinando el huevo con el calor residual para que quede cremoso. ¿Resultado? Mismo sabor, mejor textura.
¿Habías pensado en la posibilidad de meter guisos, marisco, fruta, germinados o el aperitivo en un bocadillo? Nosotros sí, y está buenísimo. Hoy te contamos cómo hacerlo.
Etólogo y escritor. En ‘Mentes maravillosas’ se adentra en la inteligencia animal. Cuanto más sabemos, más sorprenden los seres con los que compartimos el mundo
Solo hacen falta un par de trucos para convertir el insípido tofu 'normal'en la base sabrosa y crujiente sobre la que construir un rico bocadillo. El tomate asado y el pesto rematan la jugada.
Unas tortitas de origen suizo algo aligeradas gracias a la mezcla de patata y zanahoria. En lugar de freírlas en manteca, las hacemos a la sartén con un poco de aceite: todo el sabor, menos empapuce.
Si eres generoso con las verduras, justo con los hidratos y comedido con las proteínas de orígen animal puedes preparar un plato único campeón con el que apañar una comida o cena.
Hay un plato típico de la costa levantina que hace referencia a una ‘fideuada’ –una gran cantidad de fideos– hecho con marisco y pescado. Esta nada canónica versión, en cambio, usa las setas como acompañamiento.
Si tu placer inconfesable es la salsa agridulce de los restaurantes chinos, te va a encantar el toque de esta calabaza marinada con verduras, que para rematar también incorpora un toque picante.
Hacer hojaldre casero no es misión imposible, y menos aún cuando entiendes el porqué de cada paso. Con este tutorial sólo necesitarás harina, agua, sal y mantequilla para despedirte del milhojas industrial.
Crujientes por fuera y tiernos por dentro, estos scones son el desayuno o la merienda perfecta. Con café, té, mermelada, mantequilla o lo que prefieras: incluso puedes hacerlos en versión salada.
Al plato, en un buen panecillo con extra de queso, en táper para comer en el trabajo o para una barbacoa con amigos: esta hamburguesa vegetal está tan buena que ni el más carnaca podrá resistirse.
Engordamos un fondo vegetal triturando setas, verduras y un fruto seco con resultados erótico festivos y una textura muy parecida al tradicional caldo de ramen (pero sin ningún cerdo de por medio).
Fácil, sana y llena de sabor. Así es esta versión de la ensalada de col que viene a ayudarnos con los propósitos de portarnos bien en 2017 después de tanta comidorra navideña.
¿Tienes ganas de un puchero reconfortante pero no puedes esperar dos horas a que se hagan las judías? Con unas de bote, pimentón y una base vegetal lo tienes. Para rematar, aguacate y cilantro.
Se alejan las fechas de la Castañada, del Magosto, de Todos los Santos y de Halloween, pero el boniato tiene pensado quedarse todo lo que dure el frío. Hoy, nos lo comemos en forma de ensalada.
Servimos una ensalada con frutos secos, aceitunas y fruta deshidratada sobre dos mitades de calabaza asada y las aliñamos con una vinagreta que remata su aire moruno. Te gustará seas de Halloween o de Holywins.
Estrenamos página en Facebook para facilitar la vida a nuestros lectores vegetarianos o filovegetarianos. En ella sólo pondremos nuestros mejores artículos y recetas sin carne.
En el momento del año en el que no se sabe si va a hacer temperatura de otoño o de verano, las sopas que pueden tomarse frías o calientes son un salvavidas. Esta es una de ellas, y está buenísima de las dos maneras.
Enciende el horno y date el gustazo de preparar unas setas rellenas sin rebozado ni fritanga, pero igualmente crujientes y con un reconfortante sabor a otoño. El aroma que dejan en toda la casa viene de regalo.
Vuelven los básicos de entretiempo que reconfortan y abrigan el estómago: la manta en la cama, la gabardina y las peras al vino. Un postre clásico -que no viejuno- para ir calentando los motores otoñales.
Se acaba el verano y las verdulerías rebosan de sus hortalizas y frutas de temporada, diciendo a gritos “cómeme, que no volveré hasta dentro de 10 meses” o “estamos muy baratos y tu economía lo agradecera”.
Descubre, con ayuda del horno, que la coliflor no es la verdura blandurria que te servía tu madre de pequeño. De paso, invítala a comer y descúbrele las bondades de la cocción corta.
Como una versión zampabollos de Indiana Jones, fuimos en busca de la receta del Santo Grial de la tortilla de patatas gallega. Conseguimos el tesoro y volvimos más contentos que él con lo del Arca Perdida.