¿Ir a la playa o a la piscina con la nevera llena y sin haber encendido ni un fuego? Sí, se puede. Aquí te dejamos unos cuantos productos asequibles ideales para el vago y la vaga veraniegos.
Nos gusta ir a la playa cargados de comida. Grasas, hidratos, azúcar, alcohol y neveras defectuosas quieren desintegrar nuestro aparato digestivo. ¿Hay alternativas a la ensaladilla rusa radioactiva?
Preparamos un cuscús frio con tempeh, un derivado de la soja con bastante más sabor que el tofu. Y la rematamos con una tapenade de aceitunas negras sencillísima y tan sabrosa como versátil.
Hace calor, pero quieres café: uno de los dilemas del verano está servido. Si el café con hielo no te sirve como solución única, aquí tienes sugerencias para tomarlo con helado, horchata, leche y licores.
¿Pasas de sudar en la cocina pero quieres dar una comida o una cena decentes? Aquí tienes un primero, un segundo y un postre que se hacen en media hora y sin ningún tipo de sofocón.
Esta sopa fría típica de Andalucía y Extremadura suele prepararse con almendra y uvas, pero admite variaciones la textura final, el fruto seco empleado y una guarnición que puede ajustarse a la temporada.
Ligeras, rápidas, de temporada y con pocos ingredientes: las cenas de verano no son un asunto fácil, pero esperamos que esta lista de sugerencias te ayude cuando el calor te funde las ideas.
Sí, la de patatas es insuperable. Pero hay otras formas de hacer tortilla en tiempos calurosos, abriendo la puerta a calabacines, sobrasadas, berenjenas, gambas o hierbas aromáticas.
Si ya te has pasado las pantallas del hummus y el guacamole y andas en busca de nuevos horizontes para untar, esta crema de guisantes con yogur, limón y un toque de ajo puede ser la nueva protagonista de tus picoteos.
El verano es tiempo de ensaladas, y algunas frutas de temporada encajan a a la perfección en ellas. Las cerezas son un buen ejemplo: combinadas con trucha ahumada están de muerte lenta.
No caigas en el integrismo gazpachero y abre tu mente a otras sopas refrescantes. Guisantes y menta, ajoblanco con cerezas y tomate con yogur son nuestras propuestas.
Cuando suben las temperaturas las cremas frías empiezan a cotizar al alza en el recetario comidista. La de hoy lleva zanahoria pochada, caldo de verdura, cebolleta, jengibre y un toque untuoso de leche de coco.
Llega el calor y los manteles toman los parques y merenderos. Pero, ¿nos estamos jugando una intoxicación en aras de lo bucólico? ¿Hay vida más allá de los filetes empanados? Respondemos a todas las dudas.
Puede que sus años de gloria quedaran atrás, pero la gelatina tiene todas las cualidades para ser el postre veraniego por antonomasia: fresco, facilón y, desde el cariño, un poquito viejuno.
Los champiñones crudos cortados finamente son perfectos para absorber una vinagreta con un toque alegre de mostaza. Un buen tomate refresca el conjunto, y las almendras fritas le dan resistencia al mordisco.
¿Por qué ceñir las parrilladas a chuletones y salchichas? Con estas ideas podrás preparar una asadito vegetariano y diferentes acompañamientos. Si nos haces caso, no echarás de menos la carnaca.
Una vuelta de tuerca a las clásicas espinacas a la catalana, que se convierten en un sabroso plato único gracias a los garbanzos y ganan sabor con un sofrito y una puntita de butifarra.
La falsa morcilla sin carne es un aperitivo murciano para los meses de calor sin nada que envidiar a su prima cerdícola. Con un buen pan y algo rico para beber, ¿quién necesita la versión de invierno?
Melón fresco, moras de temporada y un punto lácteo de queso fresco, que suben hasta la estratosfera gracias a un toque de caramelo avainillado, menta y lima: el jetapostre veraniego definitivo ya está aquí.
¿Horno? Ni hablar. ¿Cocinar más de diez minutos? Temeridad. El verano nos genera cierto pavor a los calores cocineros, así que saca el bol y la turmix: ¡es tiempo de cremas y sopas frías!
Obra maestra del minimalismo viejuno, el melón con jamón resiste los envites del tiempo y vuelve, como Georgie Dann, puntual a su cita con el verano. Dale una nueva oportunidad con dos versiones diferentes.
La playa y la piscina son dos de los hábitats más veraniegos, pero tienes que mirar con cuidado qué te llevas para comer al sol. Aquí tienes una selección de diez recetas perfectas para estas ocasiones.
Sí, hace un calor especial, pero que no cunda el pánico. Las propuestas ligeras, fáciles y fresquitas que te proponemos en esta selección harán que se te olvide. O casi.
Saca el té de la taza y mételo en un vaso con hielo, hierbas y frutas para convertirlo en una refrescante bebida veraniega. Te proponemos tres recetas, y algunos trucos para endulzar o hacer infusiones en frío.
Un plato de mar y huerta con todo el sabor de la sepia y el clásico italiano 'aglio, olio e peperoncino'. Y en una versión ligera y bastante más fresca, que permite disfrutarlos sin necesitar después una siesta.
Dos frutas, una hortaliza: no se trata de un combate cuerpo a cuerpo, sino de una nueva combinación con la que conseguir una sopa ligera y fresca que te dará vidilla este verano. Y el que viene, también.
Te presentamos un tartar sin carne, unos tomates rellenos de inspiración setentera y un paté con frutos secos que te harán romper la monotonía tomatera del gazpacho y la ensalada.
Si crees que cocinar hoy, esperar unos días y comer fresco y rico durante otros sin hacer el huevo es uno de los mayores placeres del verano, este bonito en escabeche es el gustazo que estabas esperando.
Nos enfangamos en mahonesa hasta la cintura para desentrañar los orígenes de la ensalada más veraniega. ¿Es realmente rusa? No. ¿Vendrá Putin a reñirnos si osamos ponerle cebolleta? Quizás.
Comer en verano es difícil, y no sólo porque el calor te vuelva perezoso: hay que tener más cuidado con las intoxicaciones. Aquí tienes una guía exprés con los errores más comunes que te evitará dramas intestinales.
Ensalada de champiñones laminados con vinagreta de mostaza, bocata de queso con tomate o el adictivo sandwich de chocobanana: todo lo que necesitas para olvidar el calor y gozar.
El lomo rebozado estaba muy bien cuando teníamos 12 años, pero después de dos lustros comiendo lo mismo, igual ha llegado el momento de buscar nuevas recetas con las que innovar en picnics y comidas al aire libre.
En esta sopa, inspirada en un plato del restaurante Enigma, juntamos la dulzura del tomate rojo maduro con el toque ácido del verde. Más algunos aderezos para que todo suba.
La sopa fría de coco, lima y pollo crujiente, el 'crumble orgullo gay' de peras y manzanas o el sandwich cubano. No, no estás soñando, estás leyendo algunas de las sugerencias de nuestro menú semanal.
Si alguna vez has pensado en mudarte a Córdoba solo para comer cada día salmorejo sedoso, sabroso y perfectamente aderezado, no hace falta que hagas la maleta: aquí te enseñamos las normas básicas para prepararlo.
Repasamos las frutas, hortalizas y pescado que nos ofrece la temporada más generosa del año. De paso, aprendemos a escoger los mejores ejemplares y cómo conservarlos en óptimas condiciones.
Las hamburguesas de bonito con mayonesa de aguacate, la ensalada tailandesa o el shakshuka. Todas las propuestas de este menú son perfectas para cambiar de temporada y abrazar el verano.