La genética, la obesidad, enfermedades respiratorias o cuestiones medioambientales, como ser fumador pasivo, influyen en que un niño ronque. Un problema que afecta a su calidad de descanso y que puede mejorar con pautas adecuadas a la hora de dormir
Según envejecemos reducimos nuestra actividad diaria, lo que hace que nuestra necesidad de descanso nocturno sea menor. Con los años también aumentan las patologías relacionadas con el sueño
Este trastorno afecta a entre el 5 % y el 8 % de la población, pero hay muchos casos que no salen a la luz, y los afectados pueden sufrir serias repercusiones
El exceso de grasa abre la puerta a desarrollar a corto plazo asma, apnea del sueño, hipertensión, diabetes o mala salud mental. Si no se le pone remedio, a largo plazo, el sobrepeso y sus efectos nocivos se perpetuarán
Las razones por las que se producen los ronquidos son varias: una de las fundamentales es el sobrepeso, pero también influye la edad y la posición al dormir
El doctor Pérez-Yarza advierte de que los trastrornos del sueño en la infancia dan lugar a alteraciones de crecimiento, bajo rendimiento escolar o irritabilidad
Los humanos somos diurnos, pero con diferentes ritmos: hay quienes madrugan más y otros alargan la jornada por la noche
Independientemente del dormilón que seas, tener un sueño reparador es fundamental para la salud
Un 30% de los españoles sufre trastornos del sueño alguna vez en su vida
Más de dos millones de españoles tienen esta enfermedad, pero menos del 10% está tratada
El uso de las ‘mascarillas’ debe ser de más de cuatro horas al día