Química y traductora de inglés de formación, gastrónoma por pasión desde el 2013. Divulgadora gastronómica y fotógrafa para marcas de alimentación o medios como El Comidista y 'Bon Viveur', profesora de cocina en la Escuela Alambique de Madrid, recetea en su blog 'El invitado de invierno' y en donde le lleve el viento, gastronómicamente hablando.
La lenteja caviar es perfecta para ensaladas: quedan más enteras una vez cocidas y no pierden tanto la piel, además de tener una textura muy agradable al mordisco. En esta receta las aliñamos con una vinagreta de mostaza.
La elaboración de este dulce ligero y crujiente tiene su aquel: la masa debe ser espesa para que se pegue al molde caliente, pero no tanto como para que las flores resulten pesadas. Ésta es su historia y su receta.
Esta especie de empanada se elabora con una masa de pan enriquecida con grasa y rellena de puro gochismo: chacinas, carne adobada y huevo duro. El lunes siguiente al de Pascua, en Salamanca se lanzan a engullirlo.
Inspirándonos en la idea de los 'fishcakes' ingleses, unas tortitas a base de pescado y patata, llevamos el bacalao al aperitivo o la guarnición. Porque hay vida más allá de buñuelos y croquetas.
Para hacer esta tarta salada vegetariana tienes tres opciones: preparar la masa quebrada en casa a mano, elaborarla con la ayuda de un robot de cocina o, si eres el rey de los vagonetas, comprarla en el súper.
Hay dulces que trascienden a la Semana Santa, como el panquemao en la Comunidad Valenciana: un bollo de masa abriochada que no lleva mantequilla y sí cítricos, huevos y licor de anís.
El suflé de queso es una de las elaboraciones clásicas que dan más respeto por la fama de difíciles que tienen, pero con estas sabias instrucciones verás que tampoco es para tanto.
Este guiso marinero originario de la zona central de la Provenza fue una receta muy popular en los ochenta. De incondicional acompañante de este plato, la sabrosa y picante salsa francesa 'rouille'.
Este antojito bebe de los tacos con pescado que se elaboran en zonas costeras de México como el golfo de California. Suele ir rebozado y frito, aunque puedes aligerarlo salteando los trozos de bacalao.
Si cuando encendemos el horno para cocinar cualquier cosa añadimos unas cabezas de ajos, conseguiremos una versión suave y confitada de los mismos. Los podemos usar en platos como esta sabrosa crema.
Existen muchas formas diferentes de preparar estos paquetitos de col rellenos de carne picada y acompañados de salsa. He aquí una versión de esta receta típica de la gastronomía de Cataluña.
Se conserva mejor que la versión refinada, sale perfecto del congelador y es ideal para ensaladas, guarniciones o guisos. Te enseñamos a enfrentarte al arroz integral con una promesa: quien lo prueba, repite.
En esta época del año, un plato calentito, reconfortante y sabroso sienta de maravilla. Puedes escoger las setas que quieras, incluso usar carne de vacuno. Lo único innegociable es mojar pan en la salsa.
Un dulce perfecto para desayunos, meriendas y picoteos que puedes preparar desde cero haciendo la masa en casa o tirarte en plancha a la sección de refrigerados para agilizar el proceso.
Si quieres que algún plato te recuerde a la cocina marroquí, usa 'ras el hanut'. Esta mezcla de especias, cuyo nombre significa "lo mejor de la tienda", nos sirve para alegrar unos contramuslos de pollo con dátiles y boniato.
El chocolate y el vino casan a la perfección, y si además se aromatiza con naranja, canela, clavo y nuez moscada la cosa se pone tan sabrosa como navideña.
La técnica de la papillote consiste en cocinar el alimento envuelto en un material resistente al calor como papel de horno o de aluminio para que se haga en sus propios jugos. Con los pescados, el resultado es siempre sabroso.
Cualquier pescado fresco, de calidad y de ración funcionará perfectamente con esta elaboración sencilla, resultona, aromática y que se prepara en un pispás.
Hacer ñoquis en casa no es tan trabajoso como parece. Esta versión otoñal con calabaza es sencilla de preparar, tiene un punto dulce y combina a la perfección con sabores suaves.
El pastel más fácil que se pueda imaginar, perfecto para aprovechar la maravillosa fruta de hueso del fin del verano y dar vidilla a esos melotocones o nectarinas que amenazan con eternizarse en el frutero.
Una conserva que forma parte de la cultura culinaria norteafricana, pero también puede llevarnos hasta el Oriente Medio, la India y el Sudeste Asiático.
Una versión alegre y especiada de albóndigas que no se guisa en salsa sino a la plancha o parrilla, acompañada de una salsa fresca con base de yogur típica de Grecia y los Balcanes.
Las frutas y hortalizas más hidratantes del verano se alían en este plato ligero y refrescante, con el toque cítrico de la lima y el jengibre como potenciador del conjunto.
Esta sopa de maíz, tomate y pimiento amarillos no solo es una explosión de color, sino también una opción refrescante para cuando el calor te quita el hambre.
Dicen que en los años setenta el cocinero Ramón Roteta fue el primero en rellenar pimientos del piquillo, esa variedad navarra tan sabrosa. Hemos hecho una versión menos señorial que la suya con gambas y merluza.
La masa de esta coca destapada valenciana va sin fermentar, por lo que se prepara en menos tiempo que otras. Junto al tomate rematan la jugada los pimientos, unos piñoñes y la ‘tonyina de sorra’ (ventresca de atún salada).
Dos ingredientes de temporada y una base de patata, que cocinamos previamente en el microondas y rematamos en el horno el tiempo justo para que el pescado quede cocido y muy jugoso.
Este pan típico de la región italiana de Emilia-Romaña está emparentado con las tortas planas de todo el mundo. Para hacerlo solo necesitas harina de trigo, agua, sal y manteca de cerdo o aceite de oliva.
Acompañando a otros dulces, con frutas o con café: los helados se pueden combinar con otros productos o elaboraciones para obtener resultados aún más irresistibles. Aquí tienes algunas ideas.
Ha llegado la temporada de las excursiones al campo o a la playa, y con ellas, las fiambreras llenas de comida. Para tu próxima salida te proponemos estos rollitos de ensaladilla, que podrás devorar sin cubiertos.
El hummus, una receta típica en Oriente Medio, se ha extendido ya por todo el mundo. Si a ti también te encanta, prueba a hacer en casa esta versión con guisantes.
Los espárragos son uno de los ingredientes estrella de esta temporada, admiten muchísimas preparsciones diferentes y están buenísimos horneados sobre una masa de hojaldre de mantequilla.
Un bocado perfecto tanto para tomar en casa como aperitivo o cena como para llevar de excursión a la playa o al monte. Con verdura de temporada y una receta de masa casera.
Un postre o merienda tradicional de Semana Santa, cuyo misterio reside en conseguir una miga bien empapada en vino almibarado pero que no se rompa durante el proceso de rebozado.
La carne del conejo, además de ser muy magra y sabrosa, resulta tan versátil como la de pollo. Hoy la utilizamos para elaborar una de las recetas más tradicionales y sencillas con este animal: al ajillo.
Esta sopa tiene el máximo sabor con ingredientes muy comunes como pasta o arroz, verduras, hortalizas y legumbres. Todo ello acompañado con un buen chute del famoso pesto genovés.
La vaina de esta legumbre, prima hermana del guisante, se come entera y sin desgranar. Su sabor dulzón y textura crujiente hace que los tirabeques queden geniales al vapor o salteados, como en esta receta.
El invierno es tiempo de guisos de cuchara, y las legumbres son un alimento excelente para enriquecerlos. Aunque la costumbre nos lleve a la charcutería para darles sabor, hay otras opciones más sanas y ligeras.