Barritas de pan de centeno sin amasado
Como algunos comprobaron en el confinamiento, hacer pan en casa puede ser muy sencillo. Hoy lo volvemos a demostrar con una receta en la que ni siquiera te tienes que dejar los bíceps.
Tendemos a creer que hacer pan es un arcano, una cosa dificilísima a la que no podemos tener acceso desde nuestra inexperiencia. Pero nada más lejos, dentro del mundo del pan hay elaboraciones facilísimas, como ha demostrado repetidas veces el señor del pan, Ibán Yarza. Si para algo bueno sirvió el confinamiento de la pandemia -además de para tenerla bajo control, claro-, fue para que muchos os animaseis a meter las manos en la masa. No lo perdamos.
Una masa de centeno y trigo como la de estas barritas, suficientemente hidratada, se puede reposar en la nevera toda una noche para retardar la fermentación, darle tiempo a que la harina se hidrate y el gluten se desarrolle con el menor esfuerzo posible: el reposo en frío contribuye también a dar más sabor al pan. A esto añadimos un formado sencillísimo y minimalista para conseguir unas barritas la mar de resultonas que os harán triunfar entre propios y ajenos.
Hemos usado cierta proporción de harina de centeno integral que da un sabor riquísimo, aunque le reste ligereza a la miga, pero el resultado es estupendo: como una especie de chapatas retorcidas, pero más compactas. No busquéis grandes agujerazos en la miga -alveolos, se llaman-; a cambio encontraréis sencillez y sabor. Tal como está la energía eléctrica, el día que os atreváis a encender el horno aprovechad para hornear más cosas después del pan, que será probablemente la elaboración que más calor necesite, como una carne, un pollo, unas patatas o incluso un bizcocho. Al fin y al cabo, eso es lo que se hacía en los hornos comunales hace no tanto tiempo, que encender un horno nunca fue barato.
Dificultad: Ser delicado con la masa, que es muy blandita y pegajosa, y no dejar de espolvorear harina a tutiplén para que no se pegue.
Ingredientes
- 400 g de agua
- 10 g de levadura fresca de panadería (o 3 g de levadura de panadería liofilizada)
- 400 g de harina de trigo para pan
- 140 g de harina de centeno integral
- 10 g de sal
- 25 g de miel
- Pipas de calabaza o de girasol
Instrucciones
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