Wellington vegetariano
Sí, sabemos que el Wellington es un plato relleno de carnaca, pero hoy hemos querido hacer una versión con setas, boniatos y castañas. Cocina de invierno que abraza el vegetarianismo.
Muchos platos clásicos admiten la conversión a una versión vegetariana a las mil maravillas. Es el caso del solomillo Wellington, esa pieza de carnaza envuelta en hojaldre y acompañada de pâté y setas. Cuentan que el plato carnívoro original es de origen británico, y es posible que el nombre tuviera un significado patriótico para rebautizar un plato que podría estar inspirado en similares piezas de carne envueltas en masa del continente europeo, ese que se queda aislado del Reino Unido cuando hay tormenta en el Canal de la Mancha, que para los ingleses es el Canal Inglés. Of course.
¿Cómo convertimos un Wellington en un plato vegetariano? Es obvio que eliminando todo rastro de carne y sustituyéndola por algún elemento vegetal. Existen muy diversas fórmulas en lo que respecta a los ingredientes vegetales, como es natural; un clásico para el relleno de un Wellington vegetariano son las setas de todo tipo, así como los frutos secos que no solo aportan contraste de texturas sino que ayudan a darle solidez al conjunto; este suele ser uno de los puntos críticos cuando sustituyes carne por elementos vegetales. En ese sentido, os recomendamos que no empleéis únicamente verdura de textura ligera, porque el relleno quedará probablemente con poco cuerpo; ni cosas que suelten mucha agua porque esta irá a la masa. Cualquier verdurita de otoño-invierno con un sabor que combine con los ingredientes anteriores -como el boniato- será bienvenida.
En resumen, tomando la inspiración de aquí y de allá hemos elegido para nuestro relleno champiñones tipo portobello, que tienen algo más de sabor que los champiñones corrientes, cebolla roja caramelizada, castañas cocidas (bien hechas en casa, bien compradas al vacío), nueces y un poco de boniato, que contribuye a amalgamar el conjunto. Por supuesto, si tenéis acceso a unas buenas setas silvestres, sabrosas y variadas, usadlas en lugar de los champiñones. En cuanto al hojaldre, os recomendamos que busquéis alguna marca que lleve mantequilla de verdad en su composición, el sabor de vuestro Wellington lo acusará. Y si queréis hacer el pastel un poco menos contundente, usad masa quebrada en lugar de hojaldre.
Dificultad: La de hacer un envoltorio digno con un relleno que, indudablemente, no es tan firme como una pieza de carne.
Ingredientes
Para 6 personas
- 1 cebolla morada mediana
- 50 ml de aceite de oliva virgen
- 250 g de portobellos
- 100 g de shiitakes
- 4 dientes de ajo
- 1 chorrito de vino tinto
- 150 g de castañas cocidas
- 1 boniato mediano
- Sal y pimienta
- 1 lámina rectangular de hojaldre de mantequilla
- 1 huevo para pintar
Instrucciones
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