
Albóndigas suecas
Ya conoces las de Ikea. Ahora sólo te falta descubrir que si las haces en casa están un millón de veces más ricas.

Ya conoces las de Ikea. Ahora sólo te falta descubrir que si las haces en casa están un millón de veces más ricas.

Si tú también has soñado con compartir una comida de Acción de Gracias con los personajes de la serie Friends, estás de suerte: hoy te enseñamos a preparar los macarrones con queso de Monica.

¿Habías pensado en la posibilidad de meter guisos, marisco, fruta, germinados o el aperitivo en un bocadillo? Nosotros sí, y está buenísimo. Hoy te contamos cómo hacerlo.

Le damos la vuelta a la versión argentina de la escalopa para conseguir un queso fundido y un tomate sabroso, sin perder el crujiente característico de cualquier rebozado que se precie.

Esta combinación de marisco, huevos, cebolla y kimchi es una de las recetas icónicas de Dani Carnero, chef de La Cosmopolita en Málaga. También es solidaria: buen sabor de boca por partida doble.

Cruzamos el estrecho para disfrutar de la auténtica cocina española de fusión: la ceutí. Las influencias andaluzas, árabes y bereberes se mezclan en uno de sus platos más típicos, el pollo a la moruna con frutos secos y aceitunas.

Una papada melosa y una sardina con potente sabor a mar, envueltas en una hoja de lechuga y con la raspa crujiente del mismo pescado como acompañamiento: la versión mar y montaña del säam coreano ya está aquí.

Al plato, en un buen panecillo con extra de queso, en táper para comer en el trabajo o para una barbacoa con amigos: esta hamburguesa vegetal está tan buena que ni el más carnaca podrá resistirse.

Cerdo con tomate, aceitunas, jamón y huevo cocido: una receta más vieja que la tos de un plato prácticamente extinguido que vale la pena recuperar.

Ya está aquí la segunda entrega de nuestra sección de cocina rápida –pero buena– por excelencia. Hoy nos rendimos a los múltiples encantos de la versátil pechuga de pollo.

Una receta literaria y fabulosa para rendir homenaje a Pepe Carvalho, el detective gastrónomo, y a su creador Manuel Vázquez Montalbán. Hasta Biscuter nos daría el visto bueno.

Nos metemos en el mundo de Tolkien para hacer una receta hobbit de supervivencia: el guiso de conejo de Sam Gamyi. Un plato único y completo para aguantar un viaje hasta Mordor.

El manido filete empanado puede tener otras vidas: hoy le damos una vuelta con una salsa de alcaparras, hierbas y limón. Para que animes la cena o te las des de cosmopolita, diciendo que has hecho Schnitzel. Toma ya.

Gracias al pimentón de la Vera y a unas butifarras o longanizas, le damos un giro local y rápido a un plato húngaro y lento. Si la globalización era esto, bienvenida sea.

Ternera, jamón, salvia, mantequilla y vino dulce son los protagonistas de un plato tradicional italiano que se convirtió en tendencia gracias al padre de la cocina italiana moderna, Pellegrino Artusi.

Un taco de bacalao jugoso y al punto sobre un lecho de verduras especiadas y doradas, con una salsa verde que le aporta un toque fresco al conjunto: no te has muerto, pero te sentirás en el cielo.

Sobre puré de patata o cremosa polenta, metidas entre dos trozos de pan y con salsa de tomate o de yogur, estas albóndigas te conquistarán gracias a su jugosidad y el punto imbatible del parmesano.

¿Qué carne uso? ¿Cuánto la tengo en la plancha? ¿Con qué salsa la acompaño? Conviértete en un jedi de la hamburguesa siguiendo nuestros galácticos consejos.

Basta ya de dulces viejunos. Hoy toca abrir el baúl de los recuerdos para desempolvar una receta salada y desfasada que también merece nuestro respeto y homenaje. ¡Viva el empanado!

Descubre, con ayuda del horno, que la coliflor no es la verdura blandurria que te servía tu madre de pequeño. De paso, invítala a comer y descúbrele las bondades de la cocción corta.

El yogur ablanda la carne del pollo y además facilita que el sabor y aroma de las especias se fundan en ella: si lo dice Harold McGee, hay que probarlo cuanto antes.

Una bolsa de fideos chinos puede ser una buena base sobre la que improvisar una sopa sabrosa con algún aderezo, hortalizas y un poco de pollo. Un placer –ya no tan– culpable, listo para la cena en minutos.

De color impresionante, sabor impresionante y jugosidad impresionante. Todo gracias a que tienes un bol, una nevera y un horno: sin amasar ni más complicaciones. Bueno, bonito y barato, pero en pan.

Preparamos unas albóndigas de pollo sin freír, que se pueden tomar frías y con una mezcla de sabores que te enganchará al primer mordisco. Tómalas tal cual o conviértelas en parte de un bocata o una ensalada.

Con esta sencilla técnica de cocción conseguiremos un arroz suelto, al punto y con todo el sabor del caldo. El rape y los langostinos son sustituibles en función de lo que ofrezcan la pescadería y la temporada.

Una forma rápida y sencilla de preparar legumbres, de inspiración mexicana y muy fácil de tunear. De regalo, unas zanahorias escabechadas con un punto de chile con infinitas aplicaciones y de larga duración.

Parece una receta, pero es la fórmula para que encontrar en la frutería mangos más verdes que el Grinch no sea un drama, sino una alegría. Unas gambas, unos fideos y un aliño potente le ponen la puntilla.

El Comidista recalled the UK ambassador for consultations over the issue of the paella sandwich and other atrocities committed by the British against Spanish cuisine. The diplomat convinced us to sign a peace treaty in exchange for a great recipe for roast chicken.

Llamamos a consultas al embajador del Reino Unido por el sandwich de paella y otras atrocidades británicas contra la cocina española. El diplomático logra la paz con su receta de pollo asado.

¿Tienes el tarro de estragón muerto de la risa en la despensa? Adapta este clásico francés de Julia Child con un poco menos de vacaburrismo y sin que se resienta en nada el sabor.

Una receta que se hace casi sola y dignifica el pescado al vapor como un manjar de primera, gracias a la ayuda de las hierbas aromáticas, las hortalizas y una fiesta de cítricos y especias.

Una guía rápida para conseguir platos completos con verduras crujientes y doradas, carnes y pescados al punto y los aderezos más sabrosos. Y todo sin ensuciar nada más que un cuchillo, una tabla y una sartén.

Una receta sureña para emular a Frank Underwood, controlar el mundo libre y rechupetearte los dedos. Hasta los codos. Mientras piensas en cosas como la dominación planetaria y estrategias de alta traición.

Un estofado sencillo, rápido y sabroso, perfecto para estas noches en las que bajan las temperaturas y nos damos cuenta de que, a ciertas horas, la primavera son los padres. Al menos hasta dentro de un mes.

Una lata de confit puede hacerte quedar estupendamente en una comida o cena sin hacer prácticamente ni el huevo. En este caso lo acompañamos de unas ciruelas que aportarán frescura y algo de acidez a su toque graso.

A medio camino entre Inglaterra y Sevilla, les ponemos patitas –y sepia– a los "fish and chips" más canónicos y los paseamos por el sur, en una receta que marida musicalmente tanto con The Who como con Bambino.

Sabor intenso, textura melosa y salsorras para untar media hogaza. Hay pocos platos más completos que un buen guiso, y ahí va una selección de los que más nos pirran.

Un lecho de fina patata crujiente con tomillo y chalota, coronado por una sabrosa caballa regada con una salsa de ajo asado y limón. Suena a plato de restaurante, pero puede ser tu cena si vas calentando el horno.

Lacamos unos contramuslos jugosos con miel, salsa de chile y soja, les dejamos la piel bien crujiente y refrescamos el conjunto con una salsa de verduras de inspiración tailandesa. Resístete si puedes.

Si no tienes ganas de liarte en la cena de Nochevieja, ésta es tu receta: una carne que se hace en dos patadas con una salsorra contundente.