Corresponsal de género de EL PAÍS, antes pasó por Sanidad en Madrid, donde cubrió la pandemia. Está especializada en feminismo y violencia sexual y escribió 'Violadas o muertas', sobre el caso de La Manada y el movimiento feminista. Es licenciada en Periodismo por la Complutense y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS. Su segundo apellido es Aragonés.
Son conductoras de autobús, cirujanas, entrenadoras de fútbol, ganaderas, mecánicas... Se han abierto un hueco en espacios, todavía, ocupados mayoritariamente por hombres. A algunas les costó más, a otras menos, pero coinciden en dos cosas ellas nunca dudaron de que podían hacerlo, y nunca han entendido que alguien pudiese dudar. No se conocen, pero todas han repetido la misma frase La capacidad no tiene nada que ver con el sexo
El Lab de RTVE.es estrena 'En la brecha', un documental interactivo que recorre las historias de siete mujeres que abren camino en trabajos copados por hombres
Las mujeres tienen una larga historia, aunque apenas perceptible, en el Carnaval de Cádiz. Este es un breve repaso de su presencia en la fiesta grande gaditana
En enero de 2016, Sarah Vaughan se sentó a escribir 'Anatomía de un escándalo'. Nunca imaginó el parecido que, dos años después, tendría con la realidad
Isabel Oyarzábal Smith fue feminista, actriz, diplomática, escritora... Una obra en el Teatro María Guerrero dibuja su vida junto a otras 51 mujeres de principios del siglo XX
El premio de la asociación de Periodistas Asociados de Música sopla velas con conciencia feminista y el compromiso responsable de seguir visibilizando el talento femenino
Arabia Saudí dejará conducir a las mujeres a partir de junio, pero eso no acabará con la tutela moral y legal que los hombres tienen sobre ellas en ese país
La cultura es de esos artículos que deberían llevar la etiqueta de “primera necesidad”. Regalarla en cualquiera de sus múltiples manifestacione es siempre un acierto
El libro 'Nuevos hombres buenos' de Ritxar Bacete es una radiografía del estado de la masculinidad y un paseo por algunas de las claves para un cambio real
La más aberrante de las sorpresas de este proceso es que se ha convertido en un debate público sobre la porción de culpa de la víctima en su propia violación