
Conflicto
Hay quien dice que lo que no se nombra no existe, pero lo que no existe de verdad es lo que no se puede monetizar

Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Hay quien dice que lo que no se nombra no existe, pero lo que no existe de verdad es lo que no se puede monetizar


La realidad, que en tiempos fue temática, se ha tornado ya monotemática por obra y gracia de la globalización


Abandonamos la vivienda sin atrevernos a recoger nada, dejando a la viuda delante de su taza de café


Bienvenido sea el cartón para devolver a la tierra lo que le pertenece


El taxista me cuenta que un cliente habitual le ha regalado una botella de vino de quinientos euros con la que no sabe qué hacer. Le da miedo bebérsela y que le guste

Hay libros que te desbravan, que te doman, que te imponen el ritmo de lectura, que te quitan los nervios. No suelen estar en las primeras líneas de las mesas de novedades


El dinero que usted y yo pusimos para la construcción de los inmuebles protegidos de la voracidad financiera ha ido a parar a las manos de la clase alta y forajida


El diablo se pasa la vida planteándome dilemas imposibles, aunque le tengo dicho que a mí lo que me interesa es escribir 'Crimen y castigo' o 'Guerra y paz'

Billones de bacterias presentes en el aparato digestivo humano determinan desde el sobrepeso hasta nuestro estado de humor


En eso están ahora los dueños del mundo, en gestionar la agonía de la realidad sin dejar de hacer caja


Las frases desmembradas y las políticas sin horizonte, al evocar mi propia fragmentación, me sumen en el caos


Pese al frágil acuerdo alcanzado entre Sánchez e Iglesias, tiene uno la impresión de que España se atomiza, se licúa


Mientras todo esto ocurre, voy contándole mentalmente a un niño imaginario lo que sucede


Hago muy buenas acciones al cabo del día para contrarrestar los pensamientos horribles. Para disimular que soy un misántropo



Era el mismo Ricardo el que iba abandonando su foto en los urinarios de los restaurantes y cafeterías


El examen intensivo del árbol no debería impedir la visión del bosque al que pertenece


No hay opción que no esté contemplada y exhibida en los expositores de nuestros establecimientos


Un día carraspeé al paso de una difunta —Evita Perón— que miró hacia arriba y me hizo un gesto sobrecogedor con la mano


La pequeña preguntó a su madre en qué consistía ver. “En no tropezar”, respondió


Aun comprendiendo el malestar creado por el escenario al que nos ha conducido la torpeza de nuestros dirigentes, me resultan extrañas las connotaciones teológicas que observo en el desengaño colectivo

Hay sociedades a las que le vendría muy bien un ansiolítico, un relajante muscular, no sé, un sedante que las arrancara de la estupefacción
