_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Veneno

El taxista me cuenta que un cliente habitual le ha regalado una botella de vino de quinientos euros con la que no sabe qué hacer. Le da miedo bebérsela y que le guste

Juan José Millás
Una imagen de una mujer tomando una copa de vino.
Una imagen de una mujer tomando una copa de vino. K. Vedfelt (Getty)

El taxista me cuenta que un cliente habitual le ha regalado una botella de vino de quinientos euros con la que no sabe qué hacer. Le da miedo bebérsela y que le guste. O que no le guste. Si lo primero, odiará al cliente por tener acceso a esas delicias. Si lo segundo, se odiará a sí mismo por no ser capaz de distinguir un buen caldo del tinto que le sirven en la tasca donde suele comer con los colegas. Tras unos segundos de reflexión, añade que podría venderla también por cuatrocientos euros y de ese modo tendría solucionado el regalo de Reyes de los nietos. El mayor, de ocho años, ha pedido este año una PlayStation que sale por un ojo de la cara.

Estamos atascados porque ha empezado a chispear y ya se sabe lo que ocurre con el tráfico en Madrid en tales circunstancias. A lo mejor, pienso, no es por la lluvia, pero la costumbre general es echarle la culpa. Me pregunto, pues, quién de los dos, si el taxista o yo, caerá antes en la trampa de pronunciar la célebre frase: “Cómo se pone el tráfico cuando caen cuatro gotas”. Por mi parte, me he reprimido para evitar el tópico. Me paso la vida sorteando los lugares comunes, que son al lenguaje lo que el vino de tetrabrik al gran reserva. ¡Ojalá habláramos todo el rato con la calidad de un tinto de quinientos euros! Un Vega Sicilia, qué sé yo, pero la vida no nos lo pone fácil.

En esto, el taxista me pregunta si me interesaría comprarle la botella. Me la dejaría en cuatrocientos euros, incluso en trescientos, que es lo que por lo visto le cuesta la Play. Le digo que no, claro, y al final la saca del cofre del salpicadero y me la regala porque dice que ese vino le está envenenando la vida. Me bajo con ella del taxi sintiendo que ha comenzado a envenenar la mía.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Juan José Millás
Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_