El momento del PSOE
La fortuna ha colocado a la formación en una situación ideal. Los partidos con los que más directamente compite comienzan a ponérselo más fácil
Es Catedrático de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid y miembro de número de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
La fortuna ha colocado a la formación en una situación ideal. Los partidos con los que más directamente compite comienzan a ponérselo más fácil
Este titán podría ser el personaje mitológico que más le pegaría a Mariano Rajoy
En democracia el mejor purgante, el máximo oxigenador, siempre acaba siendo el voto
El cuento de los catalanes oprimidos por España lo han comprado también muchos alemanes, pero el caso Puigdemont es más complejo
La actitud de Cifuentes es insoportable: no importa la verdad, sólo eludir la dimisión
Tenemos un Parlamento cada vez más decorativo a la par que ruidoso, un tetrapartito que no decide y que está en permanente confrontación partidista y una clase política irresponsable y ofuscada incapaz para la acción
Son manifestaciones de espontaneidad social ajenas a liderazgos partidistas
Lo que está en juego, de lo que va todo esto, afecta al núcleo mismo de lo que entendemos por masculinidad, la revolución pendiente
Estamos huérfanos de un asidero común con el que emprender un proyecto colectivo
Uno de los aspectos más notables de nuestra sociedad es el pluralismo lingüístico
Ni la vieja ni la nueva política han dado aún con un discurso que nos una a pesar de las diferencias
Los dos grandes precursores fueron Puigdemont y el director de Tráfico
La principal fuente de conflicto gira en torno al quiénes somos y contra quién estamos
España se reflejará en el espejo catalán. Ojalá lo hiciera buscando un orden constitucional renovado en el que todos cupiéramos cómodamente
En los nacionalismos periféricos España o la nación española no existen, son “el Estado”
Ha llegado el periodo de la desilusión, el descreimiento, la bajada de la energía revolucionaria
Cataluña se nos ha ido de las manos porque ya no nos escuchamos ni tratamos de entendernos
Mientras no se reforme la Constitución, ya sabemos cuál será el final del camino
Falta por librar la “batalla final” y los contendientes acuden a ella ya derrotados
Unos han frenado su loca carrera y otros comienzan a ponerse en marcha
Hay mucha deformación del lenguaje para amoldarlo a los objetivos políticos de cada cual
Cada cual puede hacérsela suya trasladándole los rasgos de su modelo de sociedad o sus aspiraciones frustradas
Todos los partidos están a la espera de ver qué pueden pescar tras el 1 de octubre
Todos los partidos están a la espera de ver qué pueden pescar tras el 1 de octubre
Carecemos de instrumentos ágiles y eficaces para incentivar la excelencia, y nos cuesta “discriminar” entre universidades
No corren buenos tiempos para los moderados. Hoy impera la polarización
Lo que hace falta es pensar, algo que cada vez le es más difícil a la izquierda
Imaginemos que se proclama la República catalana y entra en vigor la nueva legislación fantasma. ¿Después qué? ¿Qué pasa entonces?
Para que el PSOE ahora emprenda un viraje eficaz va a tener que “sobreactuar"
El caso es buscar un blindaje efectivo de sus vergüenzas sin que importe si para ello se debilitan instituciones clave de la democracia
Lo soterrado, lo pasional, se está cobrando su venganza tras tanto “consenso de centro”
Las primarias obligan a orientarse a partir de una única referencia, la maquiaveliana: tener el poder o no
Cuando las instituciones amparan la corrupción quedan totalmente erosionadas
La actual amnesia sobre ETA es, sin embargo, diferente de aquella que nos embargó en los albores de la Transición respecto del entonces inmediato pasado franquista
Su vida consistió en darnos los instrumentos teóricos para digerir más complejidad
Si Susana Díaz gana la secretaría general, tendrá que aprender a volar sola y a marcar su propio perfil
No creo que sea muy de izquierdas eso de dejar sin su misa televisada a un conjunto de ancianos
Falta una asunción de responsabilidades propias por nuestra ausencia de vigilancia
La verdad judicial disciplina nuestra mirada, contribuye a afianzar la atribución de responsabilidades y sirve de antídoto frente al veneno de la desconfianza