
Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa
El de las proporciones es un sentido del que no puede prescindir una sociedad. Sin él, las personas con votos se visualizan como redentores y los heraldos de la verdad son crucificados

El de las proporciones es un sentido del que no puede prescindir una sociedad. Sin él, las personas con votos se visualizan como redentores y los heraldos de la verdad son crucificados

El presidente promueve una constituyente, burlando la Constitución que juró defender, y amparándose en tesis jurídicas empolladas por juristas venales

La política del odio disfrazado de amor es más peligrosa que un tiroteo en un ascensor. Especialmente si el ascensor se desploma sobre la institucionalidad

El optimismo del Gobierno colombiano consiste en ver reinvención en el fracaso. El cuentazo del vaso medio lleno o del valle de lágrimas previo al paraíso. Sumémonos

El poder requiere de mucha entereza y capacidad de asumir responsabilidades. Y, como en las carreteras, los conductores deben responder por sus infracciones

Dónde y, además, cómo. En el vía crucis que son ahora los vuelos comerciales, es clave contar con un piloto de sobrio proceder

La historia rebosa de caudillos que reclaman representar al pueblo, con un ego astronómico y beneficios particulares
Si seguimos empeñados en leer la realidad nacional desde nuestros intereses y sentires, nunca entenderemos el fuego que ya arde

Como en épocas galácticas de George Lucas, aquí seis episodios de esa franquicia de escandalosa ficción que conocemos como Colombia

Intrigante insistencia del presidente en que la gente se manifieste en la calle. ¿Temor de un golpe o, de golpe, susto por la fragilidad de su gestión?

Si hubiéramos nacido más al norte y en otra época, los colombianos habríamos tenido la lengua más rápida del Oeste. Nuestra manera de hablar explica cómo somos

La verdadera conmoción interior es la que experimentan los colombianos al ver cómo se promete alcanzar la paz y salir del marasmo a punta de labia

A pesar de memes y bromas, mucho hay de lógico en la propuesta del presidente de un tren bala en La Guajira. Pero los buenos planes necesitan rieles reales

Así como en la mesa hay normas, existen también para la política. Aquí, un decálogo de comportamiento político que nunca veremos en los videos de Carmiña Villegas

El del gas natural no es un lío menor. Es un dolor de cabeza que el Gobierno minimiza. El negacionismo solo acaba con las verdades incómodas; nunca con los problemas

Los delincuentes sirven para delinquir. Difícil cambiarles el carácter cuando han sido abusadores de menores y violadores. Y los presidentes deben servir para no servir a los bandidos

Francisco Maturana no lo dijo así. Y a lo que dijo, citando a Confucio, le castraron el contexto. Pero aplica este orden de palabras a las elecciones de Estados Unidos

El nuevo libro de Fernando Carrillo Flórez nos invita, precisamente porque el pánico comienza a subirnos por la columna, a defender la democracia sin miedo

Gran noticia la de que arranca una investigación que limpiará el nombre de un mandatario que tantos han tratado de enlodar

Los acuerdos implican que no solo el que los impulsa se imponga con sus ideas. No hay consensos a la fuerza, ni pactos regidos por la disciplina para perros

Los mandatarios sortean todo tipo de inconvenientes. Aquí y en Cafarnaúm. Pero unos pocos deben también enfrentar el hecho de ser, ellos, el mayor reto de su administración

Los colombianos clamamos a los cielos por un país menos corrupto y violento. Algo impide que Dios nos vea de rodillas: el aire está plagado de globos

Las entidades públicas reclutan escuderos digitales cuya tarea se hace con livianos argumentos y mucha cachiporra

La tragedia electoral de Venezuela comprueba que somos el continente de los pequeños grandes ídolos de barro

El músico vivo más importante del rock, el exbeatle Paul McCartney, volverá a Bogotá después de 12 años

Hemos vivido lo suficiente para ver a la izquierda convertir una sotana en símbolo suyo. Y a la espada de unidad libertaria transformarse en instrumento de división

Los ilusionistas son maestros de la sugestión. Cuando sus poderes influyen en cientos de personas, se les conoce como magos. Si son millones, llámelos presidentes
El ejercicio del poder, en aras de lograr profundas transformaciones, requiere de tiempo. Pero también de respeto por los tiempos que dicta la democracia

Si el caos precede a los grandes cambios, como dice Deepak Chopra (ese famoso oráculo de la pseudociencia), viene para Colombia un halagüeño futuro

Nuestro cambio es únicamente de protagonistas. El escenario siempre es el mismo: Colombia, el país en que ningún gobierno logra sacarnos del atolladero

El inexplicable placer que experimentamos frente al terror. Reconozcámoslo: nos gusta el masoquismo. Aun cuando las cosas marchan bien, adoramos mortificarnos

En el país del virtuosismo delictivo, bien hicieron en acabar con el programa Ser pilo paga. Todos sabemos que aquí la consigna es: ser pillo, paga

Nuestra puesta en escena no puede considerarse seria. No, al menos, comparada con la de países donde los payasos solo están reservados para los circos.

Asombrosas criaturas que logran su máximo potencial en presencia de la confusión. La que encaran y la que expelen
El lío “gordo” que armó el presidente con los supuestos motivos de la escasez de insulina es apenas uno de los generosos episodios febriles que padecemos aquí

Aunque los trinos ya no se llamen trinos, uno muy sensato resultó ganador en el concurso de los mejores del año. Y apenas estamos en febrero

Si el Gobierno y sus cortesanos exhibieran respeto por la dignidad de los jueces y magistrados, la vida sería más sabrosa para todos

Falso. ‘Vida’, la publicación oficial del “gobierno del cambio”, vale más de 650 millones de pesos. ¿Puede permitirse ese gasto el Gobierno?

El país no pega pestaña esperando la circulación del primer número de ‘Vida’, periódico en el que solo habrá cabida para la verdad verdadera. ¡Qué nervios!

Dicen que pasan tantas cosas en Colombia que los periodistas no se aburren. La verdad es que nos aburre enfrentar la catarata de desastres que amenaza con arrasarnos