“Permaneceré en este estado hasta que quizás mi cuerpo sin vida sea liberado de prisión”, escribe en una carta el cineasta, entre rejas desde julio pasado por protestar contra la detención de dos compañeros de profesión
El 26 de diciembre, la ajedrecista iraní participó en el Mundial de Ajedrez Rápido en Kazajistán con la cabeza descubierta, un gesto de protesta considerado una falta muy grave en su país. Sus fotos dieron la vuelta al mundo y anunció que emigraría a España, hoy su nueva casa. En plena ola de protestas, su historia representa la de tantas mujeres que luchan por la libertad en Irán
“No hay libertad de expresión ni seguridad. Es una gran prisión para la prensa”, describe la Asociación de Periodistas de Siria. Para las mujeres profesionales, las dificultades son aún mayores
El escritor turco, premio Nobel de Literatura y amenazado por radicales, apuesta, al hilo del atentado contra Salman Rushdie, por no relajar la seguridad y por desconfiar de responder “a las palabras con palabras”
El ataque a Salman Rushdie es un trágico recordatorio de las amenazas que autores de todo el mundo padecen. La prohibición de ciertos libros y el acoso a sus creadores es algo tan antiguo como la imprenta
Los talibanes parece que han entendido que la primera versión de su Gobierno provocó una pérdida de capital social de grandes proporciones y han optado por un reparto de poder menos unificado
Los desplazados por el avance talibán temen volver a sus lugares de origen porque apoyaron a las fuerzas gubernamentales y tienen miedo de las represalias
El peso de la cultura local diferencia a los nuevos dirigentes afganos de otros islamistas radicales y abre una rendija a que puedan mostrar cierta flexibilidad
Tras la toma del poder por los islamistas insurgentes, numerosos gobiernos, entre ellos el de España, están organizando la repatriación de sus nacionales y de los afganos que han colaborado con ellos
La politóloga suizoyemení, especialista en islam y género, considera que la izquierda es muy acomodaticia con los islamistas por temor a estigmatizar a los musulmanes
Baudelaire reclamaba como un derecho humano el irse. Después del irse, añadiría yo, viene el reírse, de lo divino y lo humano. Sin agredir. Sin tener que ir al trullo
Hay temas sobre los que pronunciarse equivale a pisar un terreno minado. Pero la realidad maniatada que proyecta un exceso de corrección política puede ser pasto de lo contrario: de un festival de bulos y palabras gruesas. De un populismo sin freno