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UNA REVOLUCIÓN EN LA MEDICINA

Los científicos investigan cómo derivar de los embriones células para trasplantes

Los campos más activos son diabetes, infarto, Parkinson , lesión medular y dolencias de riñón

Javier Sampedro

La clonación terapéutica tiene dos partes: clonar un embrión a partir del paciente, y convertir las células madre extraídas de ese embrión en tejidos trasplantables al mismo paciente. La primera parte va encaminada tras los experimentos anunciados el jueves por un grupo surcoreano. Pero los demás científicos no estaban esperando a eso para ponerse a trabajar en la segunda parte. Varios laboratorios y empresas han logrado ya notables avances para que las células madre embrionarias puedan tratar la diabetes, las lesiones medulares, las insuficiencias renales, los infartos y los males neurológicos.

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Los científicos saben que las células madre embrionarias tienen la capacidad de convertirse (diferenciarse, en la jerga) en todos los tipos de células y tejidos que existen en el cuerpo humano -eso es precisamente lo que hacen durante el desarrollo uterino normal-, pero necesitan resolver dos problemas: encontrar una receta para guiarlas por la ruta de desarrollo exacta (hacia un tipo concreto de neurona, por ejemplo) y garantizar que todas las células resultantes están diferenciadas, porque si queda alguna célula madre sin diferenciar, es probable que al trasplantarla genere un cáncer. Los proyectos más avanzados son los siguientes:

Diabetes de tipo I. Es una línea prioritaria porque ya existe una técnica que la cura -el trasplante de islotes pancreáticos de cadáver-, pero hay muchos más enfermos que donantes. Ello implica que, en el momento en que los científicos sepan diferenciar las células madre embrionarias en islotes productores de insulina, los protocolos quirúrgicos estarán ya a punto.

Bernat Soria, cuyo grupo de la Universidad Miguel Hernández en Elche (Alicante) ya logró curar a ratones por ese método, explica: "A diferencia de la mayoría de laboratorios, nosotros tenemos un procedimiento de selección que nos filtra todas las células no diferenciadas. Gracias a eso, nuestros ratones trasplantados no desarrollan tumores". Soria, que compite con laboratorios de varios países, está intentando trasladar la técnica a las células madre humanas. De momento trabaja en ello en Singapur, pero espera traer parte de las investigaciones a Andalucía.

Enfermedades del riñón. La empresa de Massachusetts (EE UU) Advanced Cell Technology (ACT), que ha perdido la carrera de la clonación humana a manos del equipo de la Universidad de Seúl, sigue siendo líder en la conversión de células madre embrionarias en varios tipos de tejidos trasplantables. En enero de 2002, el vicepresidente científico de ACT, Robert Lanza, generó un embrión clónico de vaca, extrajo de él células madre y las transformó en un órgano similar a un riñón (un mini-riñón). Tras implantarlo en la vaca original, el órgano emulaba la función de un riñón normal: filtraba la sangre y producía orina. El implante no sufrió rechazo, dado que procedía de un clon. La aplicación de esta técnica a los humanos necesita aún que los científicos aprendan a diferenciar las células madre en las precursoras del riñón.

Infarto. El mismo Lanza, de ACT, presentó el lunes pasado, junto al pionero de la regeneración cardiaca Piero Anversa, del Medical College de Nueva York, la demostración de la clonación terapéutica para reparar el corazón infartado en ratones. Los investigadores ya saben convertir las células madre obtenidas de embriones clónicos (de ratón) en células precursoras del corazón. Una vez implantadas éstas en la zona dañada por el infarto, las células proliferan y se convierten en tejido cardiaco que no sólo late coordinadamente con el resto del corazón, sino que genera los vasos sanguíneos que necesita para alimentarse. ACT y otras empresas trabajan ahora para transferir la técnica a las células humanas.

Parkinson. Esta enfermedad se debe a la muerte de un pequeño grupo de neuronas cerebrales, llamadas dopaminérgicas porque producen dopamina (un neurotransmisor, o molécula que emite señales de una neurona a otra). Ron McKay, del programa de neurociencia básica de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos, ha conseguido convertir las células madre embrionarias en neuronas dopaminérgicas. En las pruebas con animales, esas neuronas son capaces de curar el Parkinson, pero generan tumores. Como en otros casos, se precisa un sistema de selección que filtre las células madre no diferenciadas.

Lesión medular. La empresa Geron Corporation, de Menlo Park (California), posee varias licencias originales del Instituto Roslin de Edimburgo, la casa donde nació la oveja Dolly, y es el único laboratorio que se ha atrevido a anunciar un ensayo clínico basado en células madre embrionarias para el año que viene. Su idea es utilizar células parcialmente diferenciadas para intentar reparar lesiones medulares. Pocos científicos, sin embargo, creen que el ensayo pueda empezar tan pronto. Soria y otros investigadores prevén plazos de cinco años para el inicio de ensayos de cualquier tipo con células madre embrionarias.

Geron también tiene en proyecto generar células de hueso (para la osteoporosis) y de cartílago (para la artritis).

Un investigador de la Universidad Nacional de Seúl inyecta una célula somática durante un experimento en el laboratorio, ayer.
Un investigador de la Universidad Nacional de Seúl inyecta una célula somática durante un experimento en el laboratorio, ayer.REUTERS

Células adultas, la alternativa

Las células madre embrionarias proliferan muy bien en cultivo y tienen una enorme versatilidad para diferenciarse en todo tipo de tejidos, pero no son las únicas que existen. Muchos órganos adultos contienen también células madre. Son escasas y crecen mal, pero tienen la gran ventaja de que pueden obtenerse del propio paciente, lo que evita la incompatibilidad de forma tan eficaz como la clonación terapéutica.

"Los primeros ensayos clínicos que veremos estarán basados en células madre adultas", afirma Bernat Soria. "Las células madre embrionarias irán llegando después".

Las células madre de la médula ósea, de hecho, ya llevan muchos años usándose. En casos de leucemia y otros cánceres, los médicos las retiran de la médula, tratan al paciente con radiación para matar sus células cancerosas, y luego le reimplantan el material medular. Las células madre contenidas en éste reconstituyen la población celular completa.

Las células madre de la médula ósea también pueden convertirse en músculo cardiaco, y ya hay ensayos clínicos para probar su eficacia en la reparación del corazón infartado.

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