EL CAMBIO DE TONY BLAIR

Los verdes han trabajado mucho para llegar a este punto, que supone el mayor giro de Tony Blair desde que llegó a ser primer ministro. Podemos argumentar en contra, pero no hay ninguna duda de que la nueva consideración de los alimentos genéticamente modificados supone un gran cambio de intenciones. Hace un año, el primer ministro nos urgía a "resistir la tiranía de los grupos de presión", insistiendo en que los alimentos genéticamente modificados eran "perfectamente seguros". Ayer, Blair declaró casi lo contrario: "No hay ninguna duda de que existe un daño potencial, tanto en términos de salud humana como en términos medioambientales". (...) Damos la bienvenida a la repentina conversión a la causa de lo que consideró antes mera histeria. Después de llegar al Gobierno, se consideró que el Reino Unido podía ser líder mundial en biotecnología y que no se deberían cometer los errores del pasado. (...)Pero también hay mucho de política. Blair parece haber dado marcha atrás ante la apertura de la conferencia de la OCDE sobre alimentos genéticamente modificados en Edimburgo. Seguramente fue alertado sobre el hecho de que la reunión amenazaba en convertirse en "otro Seattle" con sus activistas dominando los actos. Temeroso del desastre que podía haber sobrevenido, el primer ministro calculó que sería mejor ponerse colorado antes de la conferencia.

Esperamos que éste sea el principio del cambio, que Tony Blair sea menos insensible a las preocupaciones en un futuro (...)