Málaga no es Dubái
Para una ciudad en la que muchos pequeños y medianos negocios hoteleros que viven de la clase media están condenados al cierre, la construcción de un hotel de lujo se concibe como la tabla de salvación
Es escritora y guionista. Trabajó en RNE toda la década de los 80. Ganó el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil por 'Los Trapos Sucios' y el Biblioteca Breve por 'Una palabra tuya'. Otras novelas suyas son: 'Lo que me queda por vivir' y 'A corazón abierto'. Su último libro es 'En la boca del lobo'. Colabora en EL PAÍS y la Cadena SER.
Para una ciudad en la que muchos pequeños y medianos negocios hoteleros que viven de la clase media están condenados al cierre, la construcción de un hotel de lujo se concibe como la tabla de salvación
La generación que abogó por la desinhibición sexual creyó haber inventado el sexo, error provocado por una alta vanidad generacional que aún exhiben
Es tan abusivo colocarse el primero cuando deberías estar trabajando para velar por la salud de aquellos que confiaron en ti para mejorar sus vidas, que es inevitable sentir una vergüenza delegada
El calvario al que ha de enfrentarse la persona adulta que decide encarar unos hechos ocurridos en la niñez que no le permiten respirar con sosiego es común. Se siente investigada, observada, ha de armarse de valor
La ideología de los supremacistas blancos, los Proud Boys, QAnon, el movimiento MAGA, la ‘alt-right’, o esos muchachos del Boogaloo, que se preparan para una nueva guerra civil, está claro a qué ideas responde
Quien muestra alguna preocupación social en los altos lugares del pensamiento es acusado de buscar de manera baratuna la aprobación del público
Mejor enfrentarse al frío en la clase que aprender desde una pantalla. Las criaturas fueron adoptando con rigor las medidas que los adultos sobrellevamos con torpeza
¿Cómo va a querer un ciudadano sensible participar en la vida pública? Somos más útiles, como el doctor Bouza, mejorando el mundo a nuestra escala
La ejemplaridad en nuestro país ha sido un término muy laxo, hemos aceptado la corrupción, las prebendas, los privilegios de clase como algo propio de nuestra idiosincrasia
Al señor Scrooge el fantasma de las navidades presentes le advirtió de las consecuencias de sus actos y le mostró la manera de repararlos. ¿Contamos nosotros con esa suerte?
Ha quedado claro una vez más que no hay biografía más intocable que la de los futbolistas. No hay reproche si la jugada es buena
Se pone mucho el acento en famosos negacionistas o palabreros, pero el verdadero peligro hoy es que los medios conviertan a los científicos y a los médicos en el último grito en tertulias
Con solo 22 años libró su primera batalla judicial: defendió su hogar materno tras la muerte de su padre. Entendió pronto que el viejo mito americano de la meritocracia era un camelo y hoy da agudas réplicas en el Congreso sobre inmigración, racismo, impuestos o manipulación política desde Facebook.
Tanto da que la vivienda sea un derecho. Cómo puede zanjar la señora Gamarra un debate urgente con un insulto que tampoco es tal. Dónde está su respuesta política
Los escritores americanos han hablado durante esta campaña electoral con una sinceridad y una falta de cinismo encomiable
Lo que sí es un trastorno colectivo, que está expandiéndose como el virus y es tan corrosivo como él, es el que está provocando la incertidumbre y la falta de contacto social
Hace tiempo que veníamos barruntándolo: nuestra sociedad exige a los ciudadanos un nivel de responsabilidad y autocontrol según la franja de edad
La sola imagen de un sindicalista limpiando esta semana la palabra “asesino” del pedestal de la estatua de Largo Caballero en Madrid provoca entre rabia y melancolía
Son muchas las preguntas no formuladas por una derecha que cree que puede alcanzar el poder dedicándose solo a machacar al Gobierno
El guion de nuestros días está dictado por una mente perturbada
Aquellos que han cuidado con esmero los protocolos del ocio y del negocio acusarán las imprudencias de los que han ido amontonándose en terrazas y restaurantes, perdiendo la cabeza, tanto dueños como clientes
Díaz Ayuso quería hacerse cargo de Madrid y Madrid le vino grande. Ella dijo que representábamos un ejemplo para el mundo y nos hemos convertido en el ejemplo a no seguir
En España ha calado tan hondo la idea de que nuestra cultura se reduce a cuatro famosos que viven del cuento que parece que hasta a los ministros del ramo les da siempre vergüenza hablar de dinero
Se habla de más y con el lenguaje de antes, el caduco lenguaje que cerraba la puerta a acuerdos necesarios. Es ofensivo
El cineasta ha sido el traductor de los sueños neoyorquinos que teníamos los europeos
No estaría de más que reparáramos en esas mujeres, muchas de ellas latinas, que limpian nuestras casas y cuidan de nuestros niños y nuestros mayores. Que las viéramos
En vez de ir torturadas, las mujeres suelen escoger una alpargata vistosa o esa zapatilla que les permita andar sin sufrir dolores. Si los diseñadores son avispados tomarán nota de lo que hoy se ve en la calle
Lo que cuento es una intromisión en las decisiones del profesorado y una desconfianza del espíritu crítico de los alumnos
Sé que un joven es incapaz de pensar en su decrepitud, pero yo tengo la fortuna de gozar ahora de una imaginación más amplia y quiero prepararme para una vejez digna
A cualquier cosa llamamos ahora libertad. Para mí la libertad fue atreverme a decir que no a un estilo de vida que me aportaba poco
Lo que está ocurriendo en EE UU nos revela la vigencia de una herida profunda en un país que ha usado el lenguaje cinematográfico para convertir en sueño lo que fue pesadilla
No hay que engañarse, esa irritante obcecación con el 8 de marzo es la consecuencia de una furia que se venía alimentando hacía tiempo
Hace un año estábamos amontonados en toda nuestra imperfecta humanidad, fluía la saliva por los aires, el sudor, dejábamos nuestras huellas sobre las superficies de la vida callejera
Desconozco los protocolos parlamentarios, pero no llego a comprender qué es lo que hay que negociar o intercambiar en una situación como esta
Hay ahora partidarios de una libertad en la que el deseo individual y de clase se sitúa por encima de todo
Decir que los escritores estamos acostumbrados al confinamiento del oficio es una coquetería exasperante
Hay muchas estrategias que se pueden utilizar en las relaciones políticas que denotan astucia e inteligencia. Pero Díaz Ayuso no encuentra la necesidad de recurrir al juego limpio
El discurso irracional triunfa pero, paradójicamente, somos señalados como enemigos de la libertad quienes defendemos la necesidad de un cambio
Contrastando con la insoportable y muda realidad de muchos ciudadanos, en las sesiones parlamentarias hay quienes agitan el miedo y la mentira
Para hacernos imprescindibles no debemos desaparecer ni un día. Nuestra presencia está para dar aliento