_
_
_
_
Cooperación y desarrollo
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La gobernanza común como respuesta ante las múltiples crisis

El multilateralismo representa la única solución posible a los retos actuales relacionados con la salud, el cambio climático, la desigualdad de género y el hambre. Pues ningún país avanzará de verdad si dejamos gente atrás

Vista general del hemiciclo de la sede de la ONU en Nueva York durante una reunión de la Asamblea General el 12 de octubre de 2022.
Vista general del hemiciclo de la sede de la ONU en Nueva York durante una reunión de la Asamblea General el 12 de octubre de 2022.ED JONES (AFP)

Avanzar en las soluciones necesarias para el contexto internacional actual requiere una visión global a largo plazo y la colaboración entre todos los gobiernos, el sistema de las Naciones Unidas y demás actores. Reforzar el multilateralismo es esencial como respuesta ante las múltiples crisis actuales que exigen respuestas con determinación, colaboración y una visión clara a largo plazo para construir a sociedades más inclusivas, resilientes, sostenibles, justas y libres.

Este multilateralismo reforzado emplea una financiación continua y medidas específicas para reducir las desigualdades extremas existentes a gran escala. La cooperación internacional ha demostrado claramente su capacidad de ser la única solución ante los retos y los obstáculos de estos últimos años.

Para la salud

En el ámbito de la salud pública y la respuesta ante la covid-19, la cooperación científica y logística en materia de investigación, intercambio de tecnologías y prácticas con el fin de controlar la pandemia y de crear las vacunas pertinentes, ha sido esencial para combatir de manera efectiva una crisis sanitaria global que ha amenazado nuestras vidas y el funcionamiento de las sociedades tal y como las conocíamos.

La cooperación científica y logística en la investigación, tecnología, control de la pandemia y la creación de vacunas ha sido esencial para combatir, de manera efectiva, una crisis sanitaria global

La ciencia salva vidas. Hemos avanzado en gran medida; pero aún falta mucho por hacer en los países en desarrollo donde la respuesta ante la pandemia continúa. Hemos de asegurar una recuperación inclusiva y justa, ya que solo hay solución si salimos todos juntos.

Contra el hambre

Otro de los retos clave que debemos solucionar mediante un multilateralismo reforzado es el de la seguridad alimentaria. Estamos ante la peor crisis de acceso a comida a nivel mundial de toda la historia. El bloqueo a las exportaciones de grano, las barreras existentes al comercio de productos agrícolas y fertilizantes, las emergencias ocasionadas por el cambio climático y la covid-19 nos sitúan en un contexto en el que debemos crear sistemas de reglas e intervenciones. Esto nos permitirá avanzar en la búsqueda de soluciones y evitar los niveles actuales de desigualdad y pobreza, que crean unos niveles de sufrimiento y hambre que debemos erradicar con firmeza.

El número de personas que sufren inseguridad alimentaria grave se ha duplicado

El número de personas que padecen de inseguridad alimentaria grave se ha duplicado y las crisis de hoy serán, sin duda alguna, las catástrofes de mañana. Hay que reforzar las soluciones multilaterales para conseguir una mayor coordinación que nos permita un comercio más eficiente de alimentos, productos agrícolas y fertilizantes, al igual que la reducción del coste de la energía a fin de disminuir el precio de los alimentos y los fertilizantes, que se ha disparado en los últimos años. No hay paz con hambrunas y no podemos combatir las hambrunas sin la paz.

En la lucha contra el cambio climático

El cambio climático es la lucha de nuestra generación y tiene efectos extremos sobre nuestra salud, nuestras economías y en el crecimiento de las desigualdades sociales, además de los efectos medioambientales. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2030 más de 400 millones de personas al año no podrán trabajar al aire libre debido al calor extremo que ya provoca un aumento de las enfermedades cardiovasculares y respiratorias como consecuencia del aumento de temperaturas.

El calentamiento global causa, debido a la variabilidad en las precipitaciones, una tensión añadida en el suministro de agua dulce, mayores niveles de sequía y una menor productividad en las cosechas. Esto aumenta el precio de los alimentos básicos y origina una mayor inestabilidad política. La transición ecológica de las economías no es únicamente una aspiración, sino una necesidad para conseguir el objetivo necesario de construir sociedades más resilientes a nivel colectivo y medioambiental.

Por la igualdad de género

No podemos avanzar como sociedades serias si no alcanzamos la plena igualdad entre hombres y mujeres y no aseguramos y defendemos día a día los derechos que todas deben disfrutar.

Según ONU Mujeres, la población femenina tiene hasta un 27% más de probabilidad de padecer inseguridad alimentaria. El 60% de los casos de muerte materna que se pueden prevenir se producen en entornos de conflicto, desplazamiento y desastres naturales. Cada día mueren más de 500 mujeres y niñas adolescentes debido a complicaciones durante el embarazo y el parto. Durante la pandemia global, los casos de violencia de género se han incrementado un 30% globalmente.

Las mujeres tienen hasta un 27% más de probabilidad de padecer inseguridad alimentaria.
ONU Mujeres

Los esfuerzos necesarios para la defensa de los derechos de las mujeres y niñas son esenciales en materia económica. Las mejoras en igualdad de género en la Unión Europea generarían hasta 10,5 millones de trabajos adicionales hasta 2050, con una tasa de empleo casi del 80% y un producto interior bruto (PIB) per cápita de la UE, que crecería casi un 10% más hasta 2050, según el Instituto Europeo para la Igualdad de Género. En este contexto, solo el 55% de las mujeres en edad productiva (15-64 años) participa en el mercado laboral, en comparación con el 78% de los hombres, según el Foro Económico Mundial.

La responsabilidad compartida y la solidaridad mundial son fundamentales para continuar avanzando en la defensa de los derechos humanos. Así se podrán construir sociedades más justas, inclusivas, libres y resilientes a nivel económico, social y medioambiental. Lo que nos permitirá acabar con los niveles actuales de desigualdad a favor del progreso y el bienestar mundial, y concentrarnos en aquellas personas en una mayor situación de vulnerabilidad.

El multilateralismo representa la única solución posible, pues ningún país avanzará de verdad si dejamos gente atrás. Con la ayuda del pacto mundial de la Agenda 2030, hay que continuar el trabajo diario con el fin de consolidar y expandir la igualdad, libertad, solidaridad y paz como valores irrenunciables.

Puedes seguir a PLANETA FUTURO en Twitter, Facebook e Instagram, y suscribirte aquí a nuestra ‘newsletter’.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_