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La directora de la AECID confía en dar más relevancia a la cooperación

España debe devolver a esta política internacional el papel central que "nunca debería haber perdido", ha dicho Aina Calvo en una visita en la FAO en Italia

Pruebas de despliegue del equipo Start de emergencias de la AECID el pasado febrero en Madrid.
Pruebas de despliegue del equipo Start de emergencias de la AECID el pasado febrero en Madrid. Miguel Lizana (AECID)
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España debe devolver a la cooperación al desarrollo un papel central que "nunca debería haber perdido", ha declarado este lunes Aina Calvo, nueva directora de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Lo ha dicho en Italia, donde se ha reunido con el director general de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO), José Graziano da Silva, con quien repasó la cooperación bilateral y la preparación de la Cumbre Mundial Parlamentaria contra el hambre y la malnutrición que se celebrará el 29 y 30 de octubre en Madrid.

Calvo mostró su interés en que pueda haber una mejora presupuestaria que "revierta directamente en la forma de relacionarse con los organismos multilaterales", lo que representa una "forma esencial de hacer una política para el desarrollo eficaz". La ayuda oficial al desarrollo (AOD), así como los fondos gestionados por la AECID, descendieron considerablemente durante los años de crisis económica y, sin embargo, la recuperación de esta política internacional no está siendo tan veloz como la del país, según denuncian las organizaciones del sector.

El presupuesto que España destinaba a apoyar el progreso de países menos adelantados pasó de un 0,46% del PIB en 2009 a un 0,12% en 2015. En 2016, se produjo un repunte hasta el 35% debido a operaciones extraordinarias de alivio deuda que "no suponían una transferencia efectiva de recursos a países receptores de AOD", denunciaba Oxfam Intermón al confirmarse definitivamente los datos el pasado mayo. Según los Presupuestos Generales de 2018, la ayuda alcanzaría este año el 0,22% del PIB.

Sobre el encuentro de parlamentarios contra el hambre que tendrá lugar en Madrid el próximo octubre, que reunirá a representantes de distintos países para abordar cómo erradicar la subalimentación, Calvo expresó su esperanza de que sea "un éxito en términos institucionales" y ayude a "mejorar la calidad de vida de las personas".

Destacó Calvo que el nuevo Gobierno del socialista Pedro Sánchez ha realizado "importantes gestos políticos" como crear un Alto Comisionado para la Agenda 2030, que se encargará de coordinar la implementación en España de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para 2030. Y otro para luchar contra la pobreza infantil y la malnutrición en España, cuyo liderazgo ha quedado vacante tras el nombramiento de María Luisa Carcedo, quien ocupaba esta posición, como ministra de Sanidad. 

La directora de la AECID también ha sido la encargada de recoger el galardón que la Organización Mundial de la Salud ha otorgado este lunes en Roma al equipo técnico español de ayuda y respuesta a emergencias por el proyecto Start (Spanish Technical Aid Response Team), cuyo objetivo es proveer atención médica en un hospital móvil con capacidad quirúrgica.

Este equipo, conocido como los chalecos rojos por ser esta la indumentaria oficial del personal de la Agencia Española de Cooperación en el terreno, es un dispositivo sanitario compuesto por un hospital de campaña en el que están involucrados, en cada rotación, más de 40 profesionales del sistema público de salud y otros sanitarios, ingenieros, expertos en agua y saneamiento, logistas o técnicos en electricidad y electrónica, entre otros. En total, más de 300 personas componen este equipo.

La puesta en marcha del proyecto Start ha supuesto un importe de 1,3 millones de euros a la Agencia Española de Cooperación (AECID). Por su parte, la Comisión Europea ha contribuido a la financiación con 500.000 euros y, en cada despliegue en el terreno, asumirá el 85% de los costes del traslado de dicho equipo.

El comercio internacional será cada vez más importante para alimentar al planeta

El mismo día que la directora de la AECID ha visitado la FAO y reafirmado el compromiso del Gobierno español de aumentar los niveles de ayuda al desarrollo, el organismo de la ONU ha publicado un informe sobre las perspectivas de la lucha contra el hambre en un momento en el que el cambio climático puede alterar notablemente la capacidad de muchas regiones del mundo para producir alimentos.

"Se espera que el comercio internacional de productos agrícolas contribuya cada vez de forma más importante a alimentar al planeta y responder a la aparición del hambre por causas climáticos", asegura el estudio de la FAO

Esto se debe, asegura el organismo, a que el cambio climático afectará a la agricultura mundial de manera desigual, mejorando las condiciones de producción en algunos lugares e influyendo negativamente en otros, creando en el proceso grupos de ganadores y perdedores.

"La producción alimentaria en países de latitudes septentrionales —muchos de los cuales sufren ya pobreza, inseguridad alimentaria y malnutrición—, será la más afectada", según el informe. Las regiones con climas templados, por otro lado, podrían ver consecuencias positivas a medida que el clima más cálido incremente la producción agrícola.

El director general de la FAO, José Graziano da Silva, asegura que para evitar que las brechas económicas y de seguridad alimentaria entre países desarrollados y en desarrollo se amplíen aún más, se debe "garantizar que la evolución y expansión del comercio agrícola sea equitativa y trabaje a favor de la eliminación del hambre, la inseguridad alimentaria y la malnutrición".

El último informe La seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo de la ONU, recién publicado, arroja datos preocupantes en este sentido. En 2017, 821 millones de personas pasaban hambre, son 15 millones más que el año anterior, lo que supone un retroceso a niveles de 2010.

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