2016 fue un año horrible (pero también tuvo cosas por las que brindar)

Este 2016 ha sido un buen año… para los pesimistas. Aquellos que siempre acusan mejor la influencia de lo negativo que de lo positivo han tenido varias excusas estos últimos doce meses para poder afirmar que “el mundo va a peor”. Lo cierto es que todos los años pasan cosas buenas y malas, pero este que está a punto de terminar ha dejado en muchos un regusto amargo. La incertidumbre política —no solo en España, sino también la que se cierne ahora sobre Estados Unidos—, la prolongación de la crisis de los refugiados y el fallecimiento de importantes iconos de la cultura parecen haber tenido más peso en nuestro ánimo que noticias inspiradoras y que abren caminos de esperanza en ámbitos como la medicina o el medio ambiente. En BUENAVIDA lo hemos puesto todo en una balanza.

Que te den, 2016

Por cosas como estas nos dan ganas de gritarle a este año eso de “hasta nunqui”:

1. La victoria de Donald Trump

La llegada a la Casa Blanca del candidato republicano es un hito de 2016, no especialmente positivo. Entre otras posibles consecuencias nefastas, se pone en entredicho el Acuerdo de París para frenar el cambio climático. Trump es escéptico sobre la acción humana en el calentamiento global y está en desacuerdo con el compromiso de Obama de crear un plan nacional de transición a las energías renovables: el actual presidente se muestra más favorable a los combustibles fósiles. EE UU es el segundo país del mundo que más gases invernadero emite a la atmósfera.

Con un gobierno en funciones no pueden aprobarse presupuestos ni leyes, lo que provoca, entre otras cosas, que el sueldo de funcionarios y pensiones no se actualice o que se paralicen la oferta pública de empleo y la inversión estatal, con su consiguiente pérdida de empleabilidad. Pero una de las consecuencias que más pasan desapercibidas de habernos pasado casi un año con un ejecutivo atado de manos es la dificultad de hacer frente a las obligaciones humanitarias. El Plan Director para la cooperación internacional, que España aprueba cada cuatro años, se debería haberse definido este año y todavía no existe una guía de actuación para 2017: “Cada movimiento de cooperación internacional supone un problema para un gobierno en funciones”, contaba a EL PAÍS Ángel González, vocal de Cooperación Internacional para el Desarrollo de la Coordinadora de ONGs de España. Y los más afectados de esta situación, dentro y fuera, son los de siempre.

3. La crisis de los refugiados

El drama de las personas que huyen de la guerra y la miseria es, por desgracia, imperecedero. Si en 2015 el corazón se nos encogió con imágenes como las del pequeño Aylan, ahogado en la playa, este 2016 el problema abrió informativos de forma casi constante. En mayo, EL PAÍS lanzó la colección Refugio del sonido, un compendio de música e imágenes que contribuyó a la sensibilización. En junio BUENAVIDA seleccionó cinco películas para entender esta situación, y en julio publicó el trabajo de varios fotógrafos asiduos de las fronteras. “Lo que más me ha impactado es que a pesar del drama humano, todos [los refugiados] tienen una esperanza grandísima de abrirse paso en un mundo mejor y olvidar las partes negativas del viaje”, nos contó el fotógrafo Julián Rojas.

4. La cultura, de luto

Quizá porque acaeció nada más empezar el año (el 10 de enero), la muerte de David Bowie a los 60 años nos dejó con unas malas sensaciones que los meses posteriores no han hecho sino acrecentar. También nos estremeció el fallecimiento de Leonard Cohen (7 de noviembre), con 82. Aunque somos conscientes de que los pioneros de la música popular tienen ya una edad, uno nunca está preparado para verlos marchar. Pero es que también se fueron músicos más jóvenes: Prince (21 de abril, 57 años), George Michael (el día de Navidad, 53 años) o el español Manolo Tena (4 de abril, 64 años). En el cine, lloramos a Carrie Fisher, la eterna Princesa Leia (27 de diciembre), Alan Rickman (15 de enero), Chus Lampreave (4 de abril), Emma Cohen (11 de julio) y Gene Wilder (29 de agosto), entre otros grandes que en la pantalla nos hicieron reír y llorar. También nos estremeció la muerte del escritor Umberto Eco, el 19 de febrero.

5. El zika, "emergencia global"

Originario de África, donde se identificó en personas en 1952, el virus del zika fue declarado en febrero “emergencia global” por la OMS. Se transmite a través de la picadura de un mosquito, y normalmente provoca una infección leve, pero se ha asociado a casos de microcefalia en bebés de madres infectadas y trastornos neurológicos. En enero se detectaron dos casos importados de zika en España (contraídos durante un viaje), que en septiembre ya rondaban los 300. Antes de los JJOO, se extendió la idea de que acudir a Río podía poner en riesgo la integridad de los deportistas (Brasil es el país más afectado). En julio nació el primer bebé de España con microcefalia por zika. A pesar de que aún no hay vacunas ni tratamientos contra este virus, la OMS levantó la alerta en noviembre.

6. La paleodieta

Esta dieta no ha saltado a los medios este año, pero sí ha cobrado fama. Propone una alimentación lo más parecida posible a la que tenían nuestros antepasados más antiguos, con excesiva cantidad de proteínas y muy pocos hidratos de carbono, lo que puede llevar, entre otras consecuencias, a problemas en el riñón y en los huesos. Al rescate de los carbohidratos ha venido la ciencia en 2016: tras años de demonización, la Universidad de Harvard (EE UU) ha publicado que incluir en la alimentación los considerados saludables (sin azúcar o harinas refinadas) no solo es más sano sino que ayuda a adelgazar. Para más alegría de sus seguidores, la Universidad de Sídney (Australia) ha revelado que las dietas bajas en proteínas y altas en carbohidratos contribuyen a la longevidad. No hay que olvidar que tanto las proteínas como los carbohidratos son esenciales en una dieta equilibrada (el único patrón alimenticio en el que coinciden todos los nutricionistas).

7. El divorcio de Brad y Angelina

La noticia saltó a finales de septiembre y con ella se nos cayó el mito de la pareja perfecta: buenos profesionales, atractivos, ricos y famosos, Brad Pitt y Angelina Jolie decidieron que estaban mejor separados que juntos. A nosotros nos dio pie a preguntarnos por qué las parejas insisten en casarse: aunque aún no hay datos de 2016, presumiblemente la cifra de divorcios en España haya aumentado, siguiendo la tendencia de los últimos años.

8. ‘Las Campos’

El reality sobre María Teresa Campos y su hija Terelu cautivó a los espectadores y horrorizó a los nutricionistas. El cúmulo de despropósitos alimenticios que pudieron verse en el hogar de las protagonistas (leche desnatada con Cola Cao y estevia para desayunar; nada de hidratos a partir de las seis de la tarde; o la credibilidad que se daba a los tests genéticos para adelgazar) fue proporcional al tamaño de sus casas.

Gracias, 2016

Y entre las cosas buenas, aunque no todas (lamentablemente) con la misma repercusión:

1. La vacuna contra el ébola 100% eficaz

Una de las últimas buenas nuevas de este año ha sido para celebrar a lo grande: la vacuna contra el ébola ya es 100% eficaz, según un ensayo realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Salud de Guinea, Médicos sin Fronteras y otras entidades internacionales. Esto es una buena noticia para la salud y un apoyo para clarificar el debate sobre la vacunación que existe en la sociedad, pero no en la medicina: la comunidad científica no tiene dudas de que las vacunas salvan vidas.

2. Las deportistas españolas en los Juegos de Río

Las mujeres fueron las que tiraron del carro de la delegación española en los JJOO de Río 2016. De las 17 medallas conseguidas, nueve llegaron gracias a los logros femeninos. Las exhibiciones de Carolina Martín en bádminton, Ruth Beitia en salto de altura, Mireia Belmonte en natación y Maialen Chourreat en piragüismo —las cuatro medallistas de oro— nos recordaron que hay vida más allá de La Roja.

3. Rechazo a la homeopatía

Por fin. Aunque en España los productos homeopáticos siguen pudiendo comprarse en farmacias, una buena noticia hace que veamos el futuro de la salud algo menos negro: las tres sociedades farmacéuticas españolas más importantes (SEFAC, SEFH y SEFAP) muestran su rechazo a que estos preparados tengan la categoría de medicamento y advierten del peligro para la salud que conlleva seguir terapias no avaladas científicamente. Además, en EE UU, a partir de ahora estos productos tendrán que informar (del mismo modo que las cajetillas de tabaco advierten de que fumar provoca cáncer o impotencia) de que “no hay evidencias científicas de que el producto funcione y que las indicaciones alegadas se basan únicamente en teorías de la homeopatía del siglo XVIII, que no son aceptadas por la mayoría de los expertos médicos actuales”, según ha comunicado la Comisión Federal de Comercio estadounidense. Dos pasos importantes en la buena dirección.

4. El año de la regla

Aunque aún queda mucho hacer, 2016 ha supuesto un gran paso en la visibilización de la menstruación y cómo afecta a las mujeres en su día a día. Entre otras cosas el año que se no va nos regaló titulares durante los Juegos Olímpicos sobre el asunto —una nadadora explicó que había rendido mal por los dolores que sufría— y la actriz Jennifer Lawrence habló abiertamente de la regla durante su paso por la alfombra roja de los Globos de Oro. En España, uno de los crowdfunding más exitosos de la plataforma online Verkami ha sido la iniciativa impulsada por cinco chicas para sacar al mercado unas bragas que absorben la menstruación y el flujo vaginal. Un producto más respetuoso con el medio ambiente al igual que la copa menstrual, otra alternativa a los métodos clásicos que sigue en auge. Además, una antigua reivindicación social, que las compresas y tampones no sean considerados artículos de lujo a la hora de pagar el IVA, ya es una realidad en Reino Unido. En España se ha avanzado en la misma línea con un proposición no de ley presentada en el Congreso.

5. La ampliación del permiso de paternidad

La noticia llegó justo en la recta final del 2016, pero supuso una gran alegría para quienes están a punto de ser padres. A partir del 1 de enero, los varones podrán ampliar su baja paternal dos semanas más a lo ya estipulado. Cuatro semanas de descanso que serán intransferibles y no obligatorias. Y aunque seguimos lejos de los beneficios que existen en otros países europeos como Suecia, es un paso más hacia la tan ansiada conciliación de las familias españolas.

6. Las energías renovables

2016 también fue un año favorable para el desarrollo de energías renovables. En junio, los presidentes de EEUU, México y Canadá firmaron un acuerdo en el que se comprometían a que el 50% de su electricidad provenga de energías renovables antes de 2025. “Vamos a trabajar juntos para proteger la naturaleza y para avanzar en nuestra comprensión científica de los problemas ambientales que compartimos”, dijo tras la firma del acuerdo el primer ministro de Canadá. Un compromiso con el medio ambiente que Justin Trudeau evidenció también cuando compareció ante las Naciones Unidas antes para firmar el acuerdo sobre el clima alcanzado de París. En España, la isla del Hierro batió en julio su propio récord de tiempo abastecida sólo con energías renovables: 55 horas fue el tiempo que estuvo de forma continuada la central hidreólica soportando la demanda global de la isla.

7. Los urinarios públicos y el bidé

"¿Hay algún tipo de ciencia que pueda ayudarnos a hacer que los baños no huelan tan mal?" se preguntó un buen día Bill Gates, uno de los hombres más ricos del planeta. Y de esa reflexión del empresario y filántropo surgió una iniciativa que podría cambiar la vida a millones de personas en todo el mundo: un perfume que neutraliza el mal olor de los urinarios públicos en países en desarrollo. Gates espera así que al incrementar el número de usuario se eviten diversas enfermedades que la falta de higiene contribuye a generar en muchas zonas de India y África. Muy pendientes de la higiene están también en EEUU, donde el bidé está viviendo una especie de segunda época dorada. Aunque parecía una práctica en desuso, lo cierto es que recurrir al agua para asearnos después de utilizar el váter tiene sus beneficios: es más eficaz que el papel a la hora de desechar bacterias.

8. El récord Guinness de 50 millones de árboles

Hay récords Guinness que nos resultan curiosos, pero que no cambiarán nuestras vidas, y hay otros, como el que se consiguió el pasado mes de julio en la India, que sí. Más de 800.000 voluntarios se dieron cita en un mismo día para plantar cerca de 50 millones de árboles de 80 especies diferentes. La iniciativa forma parte de las medidas que India se comprometió a tomar durante la Conferencia del clima de París, entre ellas la reforestación de sus tierras para reducir los gases de efecto invernadero en la atmósfera. El récord anterior lo ostentaba Pakistán con 847.275 árboles así que, en su objetivo de contribuir a revertir el cambio climático, los ciudadanos indios consiguieron sobrepasar la cifra con creces.

9. La identidad transgénero

La normalización, poco a poco, de distintas identidades sexuales es también es otra de las buenas noticias que nos deja 2016. El pasado 27 de diciembre el gobierno de la Comunidad Valenciana anunciaba que sus colegios se sumaban al protocolo de respeto a la identidad de los transexuales. De esta forma, los niños transgénero podrán elegir cómo quieren ser llamados en el colegio, qué ropa llevar o a qué vestuario utilizar. Una niña transgénero también protagonizó, por primera vez, la portada de la prestigiosa revista National Geographic. Tal y como explicaron sus editores en este post “hoy en día las opiniones sobre el género están cambiando rápida y radicalmente. Es por eso que este mes lo hemos dedicado a explorar ese tema a través de las lentes de la ciencia, lo social y las civilización a lo largo de la historia”.

10. El vino rosado

Es el nuevo gin-tonic, proclamamos este verano, y fenomenal que nos parece. España es el segundo productor del mundo (5,5 millones de hectolitros en 2014) del que hasta ahora era considerado patito feo de la enología, tras Francia. Versátil, fresco, glamuroso y juvenil, entra muy fácilmente, pero elaborarlo no es tan sencillo. “Hacer un buen rosado es más difícil que hacer un buen tinto. Es como cantar a capella”, nos dijo Agustí Torelló Sibill, enólogo de ATRoca.

11. ‘Pokémon go’

Habrá quien quiera enviar esta aplicación al limbo de las tragedias de 2016. Sin embargo, un juego que invita a salir a la calle a perseguir monstruos en realidad aumentada se nos resiste a aparecer como algo negativo. Será por la nostalgia: hace 20 años que Nintendo sacó el primer videojuego de Pokémon y hoy, los que eran niños en los 80 han podido descargarse esta app (incluso más que WhatsApp y Tinder, durante unos días) y ser el entrenador de Pokémon que habían soñado en su juventud. Ya lo hemos olvidado, pero mientras duró la moda, treintañeros y adolescentes podían verse apilados alrededor de la estatua de cualquier plaza o en la puerta de una biblioteca, intentando capturar una de estas criaturas. No podemos negar que el espectáculo (y el juego) ha sido divertido.

En definitiva, sí, 2016 fue un año negro en muchos aspectos, pero siendo positivos hubo bastantes más cosas que nos hicieron sentir bien. Esperamos que en 2017 la diferencia entre estas y aquellas siga ampliándose y durante los próximos 12 meses seamos testigos de noticias que confirmen que, efectivamente, el mundo va a mejor.