EL FIN DE UN PAPADO
| La situación del Pontífice
"Dios, ven a salvarme; Señor, ven pronto en mi ayuda". Estas palabras de la vieja Liturgia de las Horas acompañaron ayer a Juan Pablo II en su agonía. No había esperanzas de prolongar la vida terrenal, y el Pontífice se limitó a rezar mientras fue capaz de ello.
El día después
Las campanas de San Pedro suenan secas, tañidas a martillo, y el portón de bronce de la basílica, a la derecha de la fachada, queda entornado.
Preparativos del cónclave
LOLA GALÁN | Roma
Cardenales de todo el mundo, de forma discreta pero masiva, se movilizan para asistir al próximo cónclave en la sede del Vaticano
Los fieles
FRANCISCO PEREGIL | Roma
Miles de personas llegadas de todo el mundo se congregan en la 'plaza mayor' del Vaticano para orar por el Papa
L. GALÁN | Roma
El atentado cometido por Alí Agca, en mayo de 1981, condicionó para siempre la vida de Juan Pablo II
La situación en Roma
KARMENTXU MARÍN | Roma
Los partidos suspenden la campaña electoral y líderes de todas las corrientes asisten a una misa en la basílica de San Juan de Letrán
La opinión de los expertos
JUAN ARIAS
Reacciones en Polonia
Los polacos abarrotaron ayer las iglesias para rezar por el Papa Juan Pablo II, su compatriota más célebre, en el momento de su agonía.
Reacciones en España
El Gobierno y la oposición en España expresaron ayer su "pesar" por la agonía de Juan Pablo II cuando se debatía entre la vida y la muerte.
El camino para la destitución y procesamiento del alcalde de Ciudad de México y favorito en las elecciones presidenciales del año próximo, Andrés Manuel López Obrador, quedó abierto ayer con el dictamen de la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, por tres votos a uno, a favor del desafuero del jefe de gobierno de la capital por presunto desacato.
Río de Janeiro vivió ayer la mayor matanza indiscriminada de su historia. De madrugada, en Nova Iguaçú y Queimados, uno de los municipios pobres de Río, al menos 30 personas murieron y varias resultaron heridas, algunas graves.
El Consejo de Seguridad de la ONU decidió ayer llevar ante la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya los crímenes contra la humanidad cometidos en la región sudanesa de Darfur.
Cinco días después de que la tierra temblara con una magnitud de 8,7 en la escala de Richter, los habitantes de la capital de la isla de Nias piden a gritos que recuperen a sus familiares de entre los escombros, mientras los equipos de rescate -compuestos por el Ejército indonesio, de Singapur y voluntarios- alegan falta de medios para buscar a los supervivientes.