Víktor Yúshenko, el candidato oficialmente derrotado en las elecciones del pasado domingo en Ucrania, dio ayer un temerario paso y prestó juramento como presidente del país durante una sesión de la Rada Suprema (Parlamento). Después, por la noche, a la cabeza de una manifestación de centenares de miles de personas, se dirigió a la sede presidencial.
Silvio Berlusconi lanzó ayer un ultimátum a sus aliados: o reducción de impuestos o elecciones anticipadas. La rebaja del IRPF se ha convertido en la bandera del presidente del Gobierno italiano, aparentemente dispuesto a romper los límites del Pacto de Estabilidad de la Unión Europea y a enfrentarse con todas las instituciones para cumplir una promesa electoral de la que, según él, depende su credibilidad política.
Los participantes en la Conferencia sobre Irak, reunida durante dos días en la localidad egipcia de Sharm el Sheij, coincidieron ayer en la necesidad de que Irak celebre elecciones en la fecha prevista, el 30 de enero.
Un 47% de la población palestina vive sumida en la pobreza, según un informe elaborado por el Banco Mundial en cooperación con las instituciones de la Autoridad Nacional Palestina.
Los tres trabajadores de Naciones Unidas secuestrados en Afganistán fueron liberados ayer sanos y salvos, después de pasar casi un mes en cautividad. "En general no les han tratado mal", señaló desde Kabul el español José María Aranaz, asesor jurídico de Naciones Unidas y esposo de la norirlandesa Anetta Flanigan, que fue secuestrada en la capital afgana junto a la albanokosovar Shqipe Hebibi y el filipino Angelito Nayan.
MAURICIO VICENT | La Habana
China invertirá más de 400 millones de euros en la industria cubana del níquel y financiará hospitales, escuelas y televisores
JOAQUÍN PRIETO | París
Políticos y periodistas consideran inexplicable la polémica en torno al comisario europeo
Ensalada de ley y orden aderezada con servicios públicos. Ése será el menú con el que los laboristas confían ganar las elecciones generales, que casi todos esperan para la primavera de 2005.
SANDRO POZZI, | Nueva York
Varios escándalos y la crisis abierta por la guerra de Irak debilitan la figura del secretario general de la ONU