Los vídeos de Ryusei Ouchi demostrando su destreza con el monopatín pese a su casi total ceguera acumulan cientos de miles de reproducciones en Internet
La sudadera de Kenzo, las zapatillas con cuña de Isabel Marant o el Trio de Céline (con acento): el agregador Lyst ha recopilado los iconos más populares y buscados de los últimos diez años.
Fue la primera prenda genuinamente viral en redes sociales. Ocho mujeres que en su día la compraron cuentan qué han hecho con ella una vez pasado el furor y responden a la temida pregunta: ¿resulta vergonzoso llevar una prenda que tiene todo el mundo?
El valor de mercado de Peloton, la compañía de bicis estáticas domésticas, se desploma tras las bromas por su anuncio navideño. Ryan Reynolds aprovecha el tirón y ficha a la protagonista mientras el actor que interpreta al marido lamenta que su carrera se haya hundido por «asociarse al patriarcado».
Rocío Quillahuaman, Laura Tabarés y Roberta Vázquez son tres de los nombres que, desde sus redes, exponen con sentido del humor (y mucha viralidad) los males de la mujer joven en entornos creativos: ansiedad por la explotación laboral, guerra al humor costumbrista masculinizado y perspectiva de género y clase frente a la (falsa) ilusión de la meritocracia.
A punto de terminar el año repasamos las prendas, piezas y firmas más obicuas y populares: del encumbramiento de Bottega Veneta al último éxito low cost de Inditex.
‘Influencers’ y artistas movilizan a sus seguidores más jóvenes y con #VotaPorFavor, más de 700 ilustradores y creativos se alían sin ánimo de lucro para idear lemas e ilustraciones que animen el voto en los comicios del próximo domingo.
Tras contar el suceso en Twitter, la historiadora dice que no tomará medidas contra el staff del aeropuerto: «Soy dura. Ya he expuesto mi punto de vista».
Los usuarios destacan sus efectos visibles sobre la queratosis pilaris, esa común afección que provoca zonas ásperas en la parte superior de los brazos o en los muslos.
Por razones prácticas, emocionales o puramente económicas, la propiedad de las plataformas digitales compartidas se ha convertido en un campo de batalla habitual en cada separación.