Marta Saiz / Bernat Marrè|Bolívar, Cauca, Bogotá (Colombia)|
Las historias de Yenidia Cuéllar, Dora Muñoz y Dalia Bolaños, en diferentes regiones de Colombia, están unidas por la defensa del territorio y los riesgos y la falta de garantías para quienes defienden los derechos humanos
En 2023, se registraron 79 asesinatos. Desde 2012, cuando Global Witness empezó a documentar estos casos, han perdido la vida 461 colombianos. América Latina sigue siendo la región más peligrosa, con Brasil, México y Honduras a la cabeza de la lista
La comunidad internacional clama que los pueblos originarios son los mejores defensores del medioambiente, pero los Gobiernos y empresas son los que menos respetan sus derechos
América Latina es el lugar más mortífero del planeta para los defensores de la tierra y México uno de los países del mundo donde más aumentaron los homicidios
Son líderes indígenas, activistas y ecologistas asesinados por proteger sus comunidades. La agroindustria desplaza a la minería como origen de la violencia. Desde 2015, más de la mitad ocurre en Latinoamérica
El líder indígena, reconocido por su activismo con el premio Goldman en 2005, siguió los pasos de su padre en defender la Sierra Madre Occidental de la tala ilegal, pero en 2017 murió asesinado
La ONU tuvo que proteger a la ONG Global Witness para que sus representantes no fueran detenidos por revelar vínculos del partido oficial con proyectos hidroélectircos que han causado decenas de muertes
La entidad Global Witness reclama a Gobiernos y bancos que no negocien con regímenes enriquecidos a costa de esquilmar los recursos naturales y empobrecer a sus países