Para compensar el fuerte sabor del pescado, al arroz se le añade azúcar, lo que, a los ojos de Moñino, tampoco merece la descalificación. "En el marco de una alimentación saludable no es un problema, ya que las cantidades que se suelen comer de forma habitual de esta preparación no son elevadas. Es una opción más recomendable que otros platos a base de carnes con guarniciones de patatas fritas, por ejemplo". En cuanto a las propiedades nutricionales del alga, lo más probable es que ni las cates. Si tu árbol genealógico no ha salido de la vieja Europa, tu intestino no dispone de la bacteria Bacteroides plebeius ni de unas enzimas (las porfirasas) que sí habitan en el tracto intestinal de los japoneses y que les permiten asimilar los nutrientes de las algas. No todo el sushi engorda, no, pero tampoco es la panacea.