Economía
Los Presupuestos para 2010
| El impacto de la crisis
La austeridad sin precedentes que el Gobierno atribuye a los Presupuestos del Estado para 2010 ha penalizado más la inversión que el gasto menos productivo. Las inversiones reales (incluidas infraestructuras e I+D+i) caen un 9,4%, mientras el gasto corriente (funcionarios, compra de bienes y servicios, pago de intereses de la deuda o partidas para el desempleo) crece un 17,8%, en los Presupuestos.
La imprevisión del Gobierno sobre la gravedad de la crisis económica en 2009 ha generado un enorme agujero en las cuentas públicas. El Estado va a ingresar 41.634 millones de euros menos de lo que preveía y un 15% menos que en 2008, según la estimación que figura en los Presupuestos de 2010.
La distribución regional
Más del 40% de los 6.500 millones que el Gobierno espera recaudar con la nueva subida de impuestos irá a las comunidades (2.000 millones) y los ayuntamientos (800 millones). Pero ni este último esfuerzo del Ejecutivo para aliviar las maltrechas arcas de las administraciones territoriales impedirá un recorte en la transferencia de recursos a gobiernos autonómicos y locales el próximo año.
El impacto en las empresas
El Gobierno ha metido la tijera a la rebaja de cinco puntos en el Impuesto de Sociedades a las pymes que mantengan empleo. La medida fue uno de los anuncios estrella que realizó Zapatero en el debate sobre el estado de la nación del pasado 12 de mayo y el viernes fue presentada por Elena Salgado como la única rebaja de impuestos a contraponer a las subidas del IRPF y del IVA.
Las prioridades del gasto
El ajuste de las cuentas públicas lleva este año a que casi todas las políticas reciban algún mordisco. Algunos incrementos, como el presupuesto de Educación, incluyen recortes en ciertos programas (educación infantil) y los recortes, por ejemplo en infraestructuras, no afectan a las joyas de la corona, como los aeropuertos o la alta velocidad.
Los altos cargos
La economía de guerra defendida por el Gobierno para estas cuentas no ha logrado reducir el gasto. Ni la moderación salarial de los funcionarios, ni la congelación del sueldo de todos los altos cargos, ni tampoco las restricciones en nuevas incorporaciones han logrado recortar o mantener los gastos de personal del Estado en 2010, que subirán un 2,7% respecto a este año, hasta alcanzar los 27.
La sangría del paro
Si algo ha cambiado en el presupuesto estatal de las épocas de vacas gordas a las de vacas flacas es el gasto en protección al desempleo. Hace cuatro años, las cuentas públicas de 2006 planeaban gastar 13.578 millones en los parados. El paro rondaba el 8,5%.
Las compañías del Estado
Las 93 sociedades mercantiles y entidades empresariales encuadradas en el sector empresarial público ganarán en 2010, si se cumplen las previsiones, 1.308,83 millones de euros. Con una cifra de negocio en conjunto de 27.373,4 millones, el resultado previsto es menos de la mitad (56,3% menos) de lo contemplado para el ejercicio 2009, que ascendía a 2.
José Ignacio Goirigolzarri dejará con carácter inmediato el cargo de consejero delegado del BBVA tras la renuncia presentada ayer al consejo de administración de la entidad, al tiempo que aprobaba proponer a la junta de accionistas la ampliación de la jubilación del presidente hasta los 70 años.
Septiembre ha roto la tregua que había comenzado tan sólo un mes antes. Tras un año de caídas consecutivas en la tasa de inflación, agosto vio el primer repunte. Se pasaba de un -1,4% a un -0,8%, lo que contribuía a alejar el fantasma de la deflación, la caída de precios continuada que se había convertido en la mayor pesadilla de los analistas.
Un juzgado madrileño ha condenado a Altae, el banco privado de Caja Madrid, a pagar 114.000 euros a dos clientes a los que no informó de las posibilidades de vender bonos de Lehman Brothers antes de su hundimiento, lo que le convierte en el primer condenado en España por los perjuicios de la quiebra del banco.