El Consell ha decidido situar nuevamente en el centro de su argumentario político los agravios que, en su opinión, sufre la Comunidad Valenciana por parte el Gobierno central. Durante la última semana, el PP ha redoblado sus esfuerzos, coincidiendo con el segundo aniversario de la victoria electoral del PSOE, por mantener vivo el agravio por la derogación del trasvase del Ebro y el retraso en infraestructuras como el AVE.
Los socialistas valencianos piden al Consell, a través de una iniciativa parlamentaria, que amplíe de cuatro a 19 los centros públicos acreditados para la extracción de sangre del cordón umbilical dada la escasez de estas unidades.
El alcalde de Vila-real, Manuel Vilanova, del PP, ha añadido otra fricción a sus espinosas relaciones con la Policía Local. Después del enfrentamiento con el jefe del cuerpo ha ordenado la apertura de un expediente disciplinario a otro policía porque multó el vehículo oficial del alcalde.
La factura por los destrozos en el mobiliario urbano y la limpieza de toneladas de basura dejada en las calles durante las Fallas se ha duplicado. La concejal de Medio Ambiente, María Jesús Puchalt, constató ayer "un incremento importante del vandalismo y la suciedad" en las fiestas de Valencia, y lo achacó a la "afluencia masiva" de visitantes.
La consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, dijo ayer que en los últimos años ha habido "ligero repunte" de situaciones de maltrato familiar a menores como las de la semana pasada en Burjassot y Torrevieja.
La evolución del empleo en los sectores culturales de la Comunidad Valenciana se mantiene alejado de la media española.
