Grupos agrarios y ecologistas demandan a Monsanto por las semillas transgénicas

Una asociación de agricultores y un grupo ecologista, ambos estadounidenses, presentaron ayer una demanda contra la multinacional biotecnológica Monsanto por "violación de las leyes antimonopolio" y por vender semillas alteradas genéticamente "sin haber comprobado su seguridad para la salud y el medio ambiente". Los demandantes son la Coalición de Explotaciones Agrícolas Familiares y el grupo ecologista Fundación sobre las Tendencias Económicas (FET), dirigido por el escritor Jeremy Rifkin. Monsanto sostiene que la demanda es injustificada.Rifkin señaló ayer que el principal objetivo de la demanda es forzar a la industria a asumir mayores responsabilidades sobre sus productos. Por ejemplo, dijo, Monsanto debería haber hecho más pruebas sobre la seguridad de una de sus principales semillas transgénicas, el maíz Bt, en países distintos de Estados Unidos, para determinar si esta semilla supone riesgos para el medio ambiente en diferentes climas y tipos de suelo.

"Esta demanda pone el foco del debate directamente sobre las empresas biotecnológicas y sobre el futuro de la agricultura", dijo Rifkin. "El asunto ya no será un simple conflicto económico entre Estados Unidos y la Unión Europea".

Los agricultores norteamericanos han acogido bien las semillas transgénicas durante los últimos tres años, pero la creciente preocupación ciudadana sobre la seguridad de estas semillas -un asunto sobre el que no hay ninguna evidencia científica sólida- ha empezado a inquietar a algunas asociaciones agrarias, por el temor de que sus cosechas se vean rechazadas por los consumidores.

En EE UU, la mitad de la soja y un tercio del maíz plantado en 1999 fue transgénico.