El Gobierno salvadoreño afirma que el terremoto no alteró el proceso de paz

Las dificultades sociales y económicas ocasionadas en El Salvador por el terremoto del pasado 10 de octubre no van a ser obstáculo para que continúe el proceso de pacificación, declaró ayer en Madrid el ministro salvadoreño de Planificación y Coordinación del Desarrollo Económico y Social, Fidel Chaves. El ministro, que realiza una gira por Europa para recabar ayuda para la reconstrucción de las zonas afectadas, concluyó ayer su visita a España.

Chaves reconoció que el terremoto ha agudizado la situación social y económica de su país y valoró los daños- ocasionados en 1.000 millones de dólares (unos 135.000 millones de pesetas), lo que equivale a un 25% del producto nacional bruto de El Salvador. No obstante, manifestó su esperanza en que "el terremoto sea el punto de partida para acentuar el proceso de paz"."El FMLN [Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional] dijo que la guerra continuaba, que el terremoto no tenía nada que ver, pero se ha producido un mayor consenso de todos los sectores sociales alrededor del programa de reconstrucción nacional", aseguró el ministro.

Durante su estancia en España, Chaves ha firmado una carta de intenciones sobre cooperación entre ambos países y negociado un crédito blando, aunque no se ha determinado su importe.

La ayuda española se concretará en asístencia técnica para un programa de promotores rurales de salud comunitaria, así como para la realización de proyectos educativos y de restauración de monumentos nacionales.

Antes de viajar a Madrid, Chaves estuvo en Roma, donde firmó un acuerdo de cooperación técnica y financiera por 130 millones de dólares, 90 de ellos en concepto de cooperación y el resto en forma de créditos blandos. El ministro salvadoreño viajará hoy a Bruselas para entrevistarse con representantes comunitarios y posteriormente lo hará a Bonn.

Chaves fue ministro de Asuntos Exteriores de su país entre 1980 y 1984 y, como tal, siguió de cerca la formación del Grupo de Contadora. En su opinión, Contadora sigue siendo un instrumento válido, aunque necesita ser reactívado para salir de su letargo. No obstante, Chaves insistió en que para lograr la paz en la región "es necesario que Nicaragua flexibilice su postura".