Las autoridades de Comercio y Sanidad desconocen la importación de 25.000 kilos de gambas tóxicas de Taiwan
Unos 25.000 kilos de gambas congeladas y en mal estado, importadas de Taiwan, de marca Jaili Brand, que pueden incluso causar la muerte si se comen crudas, entraron irregularmente en España por la frontera de Irún, en noviembre o diciembre pasados. Las autoridades de Comercio y las sanitarias, preguntadas por el Ayuntamiento de Madrid, donde se produjo la denuncia inicial, afirmaron desconocer hasta el momento esta importación y qué porcentaje de la partida ha sido consumido y dónde. Estas colas de gambas peladas han sido prohibidas en Suiza, en Italia y en Holanda, donde causaron la muerte a 12 personas mayores.
Fuentes municipales madrileñas creen que la mayor parte de esta partida fue consumida en la campaña de Navidad, y aventuran que no se produjeron graves consecuencias, porque al cocer o freir las gambas se elimina la bacteria shigella flexneri, causante de las intoxicaciones y defunciones.Desde que un particular llevó el pasado día 24 del mes de enero al laboratorio municipal de Madrid un paquete de gambas de la marca Jaili Brand para su análisis , una cortina de misterio y contradicciones por parte de las autoridades municipales y sanitarias envuelve el tema.
A pesar de que las autoridades municipales y las sanitarias de la Administración central tienen conocimiento desde el pasado jueves, día 2, de la toxicidad de estas gambas de Taiwan -porque en esa fecha se conocieron los resultados de los análisis del laboratorio municipal de Madrid-, no se ha hecho ningún llamamiento oficial a la población para que se abstenga de consumir las que queden en el mercado, ni se ha cursado prohibición formal de las mismas.
Fuentes oficiales del ayunta miento han anunciado que hoy darían cuenta del curso de las investigaciones, que "comenzaron el mismo día que se supieron lo resultados del laboratorio". Según las mismas fuentes, hasta ayer tan sólo se habían encontrado, tras un barrido de minoristas y almacenes, unos 100 kilos de estas gambas, que parece que no estaban a la venta.
Comercializadas por una empresa coruñesa
Según se desprende de las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora por el Ayuntamiento de Madrid, las gambas tóxicas distribuidas en diversos países de Europa por la multinacional Johnson Food, de Nueva York entraron en España en un camión por la frontera de Irún y fueron comercializadas por la empresa coruñesa Alimentos del Atlántico, Aliko. Sin embargo, en la delegación de Sanidad de La Coruña han explicado que, desde 1982, Aliko no ha solicitado permiso de importación de gambas del sudeste asiático, según la agencia Efe.Aunque los responsables de Abastos del Ayuntamiento de Madrid y otras fuentes de Mercamadrid negaron en principio que estas gambas hubieran sido comercializadas precisamente en este centro de distribución de alimentos, algunos minoristas han afirmado que recibieron la mercancía precisamente a través de Mercamadrid, y que así lo hicieron saber a inspectores y responsables de distrito.
Fuentes oficiales del Ayuntamiento de Madrid explicaron que cuando descubrieron la existencia de la toxicidad en las gambas preguntaron a los ministerios competentes -Comercio, Sanidad y Consumo- sobre el origen de esta partida. Éstos dijeron que las gambas no habían pasado a España, al menos legal y oficialmente.
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