El teatro que viene: menos política, más existencialismo

La crisis financiera de 2008 provocó tales secuelas sociales que no tardaron en verse reflejadas en los teatros con un aluvión de espectáculos de fuerte carga política y muy pegados a las problemáticas del momento. Pero la pandemia, casi tres lustros después, rompió la tendencia: los creadores parecen haberse replegado sobre sí mismos. Muchas de las obras que se verán en 2023 se centran en temas íntimos, introspectivos, existenciales o en el propio hecho teatral. O son revisiones o relecturas de los clásicos. Lo que sigue es una pequeña selección de algunos estrenos prometedores (algunos tendrán gira nacional después) que se verán en España en los próximos meses.

Dramaturgia española contemporánea

Arranquemos el año con fe. La voluntad de creer, espectáculo revelación del pasado otoño tras su estreno en Madrid en septiembre, empezó el miércoles en el Teatre Lliure de Barcelona una gira que continuará en A Coruña, Sevilla, Zamora, Barakaldo y Murcia. Escrita y dirigida por Pablo Messiez (es argentino, pero entra dentro de la categoría de dramaturgia española porque lleva años afincado en Madrid), la obra se inspira en una película de culto de Dreyer, Ordet, para darle una vuelta de tuerca a los mecanismos de la fe: pero no desde un punto de vista religioso —a pesar de que hay un personaje que se cree la reencarnación de Jesucristo— sino desde una perspectiva maravillada por la capacidad del ser humano de creer en lo que quiera creer. Sofisticada, original y con más capas que una cebolla, pero a la vez cargada de humor y fácil de disfrutar.

Otra apuesta que es segura porque ya se vio el año pasado es Supernormales, obra de Esther F. Carrodeguas que el Centro Dramático Nacional (CDN) estrenó la temporada anterior y repondrá en marzo por aclamación popular. El espectáculo, dirigido por Iñaki Rikarte, pone en cuestión prejuicios y correcciones políticas con un reparto de actores y sin discapacidad que hablan de sexo con humor y sin tapujos. Una curiosidad: en el elenco figura Carlota Gaviño, que también actúa en La voluntad de creer. Y en otra obra destacada del otoño en Madrid que empieza en breve su gira nacional: Lectura fácil, la adaptación teatral de la novela homónima de Cristina Morales dirigida por Alberto San Juan.

Aparte de estas y otras muchas producciones arrastradas del año pasado, en los próximos meses verán la luz nuevos textos de destacados dramaturgos españoles. Empezando por el más consagrado, Juan Mayorga, que viene de un annus mirabilis durante el cual se estrenaron dos textos suyos —El Golem y Silencio, este último con dirección propia— y ganó el Premio Príncipe de Asturias de las Letras. En 2023 habrá otros dos: Amistad, que empezará su andadura el 26 de enero en el Teatro Español de Madrid con puesta en escena de José Luis García-Pérez, y María Luisa, con dirección del propio Mayorga, a partir del 20 de abril en el Teatro de la Abadía de Madrid.

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Tráiler de la obra teatral 'Supernormales'.

La nueva obra de Pablo Rosal, autor que dio la campanada hace dos temporadas con Los que hablan, resulta también prometedora: Asesinato de un fotógrafo, una pieza que podría calificarse como “teatro noir”, que es a la vez homenaje y parodia de los convencionalismos de la novela policiaca clásica. Dirigida por Ferran Dordal, se presentará el 18 de enero en la sala Beckett de Barcelona y en abril se verá también en la Abadía.

El dramaturgo José Manuel Mora y la directora Carlota Ferrer, cuya obra Los nadadores nocturnos ganó en 2015 el Max al mejor espectáculo revelación, han puesto en pie una continuación titulada Los nadadores diurnos con la misma estructura: si aquella presentaba un caleidoscopio de personajes en torno a una piscina, la segunda parte se desarrolla en un salón de belleza. Se estrena el 9 de febrero en el Español.

Lucía Carballal, otra dramaturga española de gran proyección, estrenará Los pálidos, que además supondrá su debut como directora de escena: una inmersión en la industria televisiva protagonizada por un equipo de guionistas a la busca desesperada de un éxito, un mundo que la autora conoce bien porque ella misma es guionista. La première será el 20 de febrero en el CDN. Cuatro días después, esa misma casa presentará una nueva obra escrita y dirigida por su director artístico, Alfredo Sanzol: Fundamentalmente fantasías para la resistencia, que se mete en el charco de la guerra de Ucrania a través de una compañía teatral que convierte su local de ensayos en un refugio mientras prepara un espectáculo ad hoc titulado Pin, Pan, Putin. A falta de ver el resultado en escena, se intuye una buena mezcla de humor y tragedia, tal vez como la que logró Ernst Lubitsch en su inolvidable película Ser o no ser.

Yoan Yago, otro autor en auge desde hace una década como miembro de la compañía La Calòrica, se acerca a la vivencia de la muerte por parte de los adolescentes en Tot el que passarà a partir d’ara (Todo lo que va a pasar a partir de ahora), que se estrenará en el Lliure el 29 de marzo, con puesta en escena de Glòria Balañà i Altimira.

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Tráiler de la adaptación teatral 'Lectura fácil'

Este 2023 debería haber sido el año en que se estrenara Muero porque no muero, monólogo de Paco Bezerra que resucita a Teresa de Jesús en la España de hoy, pero el Gobierno de la Comunidad de Madrid vetó su presentación en los Teatros del Canal, prevista para este mes de enero. No obstante, la santa parece especialmente inspiradora en estos tiempos, pues el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) estrenará el 27 de abril otra obra que bebe de la vida y obra de Teresa de Jesús, Mal de corazón, de la dramaturga argentina afincada en Barcelona Victoria Szpunberg.

Y ya casi cerrando la temporada, el 12 de mayo llegará al CDN otra producción prometedora: Falsestuff. La muerte de las musas, del dúo más gamberro del teatro español, Nao Albet y Marcel Borràs. Se trata de una revisión del espectáculo del mismo título que estrenaron en 2018 en el TNC, igual que hicieron hace dos temporadas con su exitoso Atraco, paliza y muerte en Agbanäspach. Inclasificables, divertidos y siempre desbordantes de imaginación.

Autores extranjeros

El actor Eduard Fernández estrenará el 21 de enero en el teatro Calderón de Valladolid su primer monólogo, Todas las canciones de amor, un emocionante texto del argentino Santiago Loza sobre el sentimiento maternofilial, con dirección de Andrés Lima. En el recién reabierto teatro Pavón de Madrid se presentará el 25 de enero Contracciones, inquietante obra del británico Mike Bartlett que escarba en el proceloso mar de las relaciones laborales contemporáneas, interpretada por Candela Peña y Pilar Castro con puesta en escena de Israel Solà, compañero del antes citado Yoan Yago en la compañía La Calòrica.

El uruguayo Gabriel Calderón se está haciendo un hueco importante en los escenarios españoles. Tras los recientes éxitos de Historia de un jabalí o algo de Ricardo y Ana contra la muerte, el 16 de marzo se estrenará en el Español otro texto suyo, Uz: el pueblo, dirigido por Natalia Menéndez. La bailarina y coreógrafa Luz Arcas se lanzará al teatro de texto con una particular versión de Psicosis 4.48, de la británica Sarah Kane, a partir del 7 de junio en el Español. Y Sergio Peris-Mencheta pondrá en pie Cielos, cuarta y última pieza de la tetralogía de tragedias que el libanés Wajdi Mouawad inició con su célebre e impactante Incendios, que presentará el 14 de junio en la Abadía.

Clásicos, revisiones y adaptaciones

Los clásicos griegos no pasan nunca de moda: la actriz Fernanda Orazi debuta como directora con una adaptación muy personal de la Electra de Sófocles, el próximo jueves en la Abadía. Tampoco falta nunca un lorca: la Yerma que el director Juan Carlos Martel estrenó el pasado noviembre en el Lliure llegará un día después al CDN. Carme Portaceli presentará el 18 de enero un nuevo montaje del clásico catalán Terra baixa, de Àngel Guimerà, con versión de Pablo Ley. Ibsen nunca falla: hasta el 29 de enero está en cartel en el Lliure una Hedda Gabler dirigida por Àlex Rigola. Otro ibsen: Espectros, con puesta en escena de María Fernández Ache, en el Español a partir del 27 de enero. Los veteranos José Luis Gómez y Ana Belén protagonizarán uno de los proyectos más exóticos del año que se estrenará el 3 de marzo en el Calderón de Valladolid: darán vida a Romeo y Julieta en una obra del austriaco Eberhand Petschika que cambia el final que dio Shakespeare a los dos enamorados; no murieron, sino que se sumergieron en un largo letargo del que despiertan ya siendo ochentones, sin reconocerse mutuamente.

El año viene también cargado de adaptaciones de novelas. La versión de El paraíso perdido de Milton que estrenó el año pasado Andrés Lima hará gira por varias ciudades. Ernesto Caballero llevará a las tablas El proceso, de Kafka (en febrero en el CDN). Madame Bovary cobrará vida en los Teatros del Canal (febrero) y el TNC (marzo) en versión del belga Michael de Cock con puesta en escena de Carme Portaceli. La incombustible Núria Espert volverá a las tablas junto a Vicky Peña para protagonizar una adaptación de La isla del aire, de Alejandro Palomas, bajo la dirección de Mario Gas (en marzo en el Romea de Barcelona). Las amistades peligrosas, adaptada por Carol López, se verá en el Lliure en mayo. Y un nombre que nunca falla en los escenarios es el de Miguel Delibes: este año siguen de gira Las guerras de nuestros antepasados, Los santos inocentes y Mujer de rojo sobre fondo gris.

Producciones internacionales

Las grandes producciones internacionales se suelen concentrar en los grandes festivales de otoño o de verano, no deben pasarse por alto los siguientes nombres que aparecen salpicados en las programaciones regulares de algunos teatros. El novelista francés se interpreta a sí mismo en la versión teatral de su libro Quién mató a mi padre, dirigido por el alemán Thomas Ostermeier (Centro Conde Duque de Madrid, enero). El director francés Philipe Quesne presentará Farm fatale en el CDN (enero). El griego Euripides Laskaridis presentará Relic (Conde Duque, febrero). Desde el parisino Théâtre des Bouffes du Nord llegará La mouche, firmado por Valérie Lesort y Christian Hecq (Canal, febrero). La belga Anne-Cécile Vandalem traerá Kingdom (Canal y Lliure, marzo).

La argentina Andrea Garrote hará una pequeña gira en con su poderoso monólogo Pundonor, con el que ya asombró el año pasado en Madrid (Madrid, Sevilla, Palma). La británica Katie Mitchell traerá su vanguardista versión Orlando, producida por la Schaübuhne de Berlín (Canal, abril). La corrosiva compañía francesa Chiens de Navarre presentará La vida es una fiesta (Canal, abril). De la excéntrica compañía irlandesa Dead Centre se verá una adaptación de la película El silencio, de Ingmar Bergman (Canal, abril). Y la belga Miet Warlop hará doblete en Barcelona y Madrid con After All Springville (Lliure y Canal, abril y mayo).