Odio España
El independentismo no puede dejar de desacreditar a España, pero no puede ofender más de la cuenta los sentimientos de aquellos catalanes que sienten afecto por España porque los necesita para ser mayoritario
El independentismo no puede dejar de desacreditar a España, pero no puede ofender más de la cuenta los sentimientos de aquellos catalanes que sienten afecto por España porque los necesita para ser mayoritario
Sánchez ya debería saber que no hay peor idea que la de acorralar a Iglesias; si hay repetición de elecciones, el PSOE tendría más responsabilidad política porque tiene más margen de maniobra
Aunque la democracia no busque descubrir la verdad, no puede funcionar si en el ágora público se pretende engañar al ciudadano en las cuestiones fundamentales.
En 2003 Esquerra Republicana fracasó, pero ahora parece estar en mejor posición para restaurar y encarnar el anhelado rol que jugó Convergència Democràtica
Embelesado por su propia retórica, buena parte del independentismo no entiende aún que imponer un referéndum unilateral a la otra mitad de Cataluña puede ser vivido por ésta, como un acto de hostigamiento.
La precipitada e infeliz ambición de Albert Rivera para ser presidente ha provocado un cúmulo de errores muy llamativos
El autor decidió que la palabra sería modo de vida gracias a los artículos que escribía en EL PAÍS el fallecido Premio Cervantes
No, no todos los españoles, ni siquiera una mayoría de ellos, se benefició de la conquista
La declaración de Junqueras, al no interactuar con nadie, fue una metáfora del procés. Un monólogo. Una parte ignora a las demás porque la independencia es cuestión de justicia y no se pide opinión de los demás
Los cambios alteran las condiciones que hacen posible algo similar a lo que sea que se quiere restaurar. Por eso la pulsión restauradora tiene algo de necrofilia: se alimenta de un deseo por algo que ya murió.
La impunidad del linchamiento, digital o no, y la del acosador se apoya en la sensación de ser parte de una masa casi anónima
Ciudadanos ha convertido la Constitución en arma arrojadiza de sus rivales políticos y no solo de los enemigos de la ley
Arcadi Espada parece haberse convertido en la contraparte constitucionalista del nacionalismo perfeccionista
Dile a tu vicario que monte pollos en Washington. En Tarragona. En Barcelona. Allí donde esté, que sea protagonista
Lo que se pide desde Cataluña no puede ser, por razones conceptuales y empíricas, el derecho a la autodeterminación. Lo que se pide en Cataluña es el derecho a la secesión.
Colau sugiere la idea conservadora de que sus relaciones gais fueron producto de la confusión juvenil
Para los 'runners' no cuenta la diversión, solo la relación de productividad entre kilómetros corridos, calorías y tiempo invertido
La idea de que se admiten españoles dentro del proyecto independentista funciona siempre que estos defiendan que España es un Estado autoritario
La llegada de Sánchez no debe ser interpretada como un retorno a la vía bilateral, sino al momento multilateral
El ‘procés’ buscaba ocupar el poder a través de una estrategia sofisticada de comunicación
¿Qué queda del proyecto inicial de Ciudadanos, el que nació en Cataluña? Dudo que quede demasiado
Puigdemont está comprometido con una causa como no lo está nadie ahora mismo en Europa; su causa es él mismo
Il Cavaliere, sin ser un animal político, era un político eficaz; el presidente de EE UU, en cambio, es una nulidad política
Lo que guió a los dirigentes independentistas fue perjudicar a España aunque eso no tuviera rédito político alguno
La estrategia de independentistas y Ciudadanos de apelar al sentimiento tribal nos lleva al lado tétrico de la historia
Algún líder independentista debía decirles a los suyos la verdad, a saber, que ya no era obligatorio hacer historia cada fin de semana
La esperanza de los comunes es que el ‘procés’ termine, lo que no garantiza que las cosas irán mejor porque sería razonable que se reconstruyera el PSC