
¿Cuál de los dos?
Fue ella quien le propuso que telefoneara al supuesto difunto para salir de dudas

Escritor y periodista (1946). Su obra, traducida a 25 idiomas, ha obtenido, entre otros, el Premio Nadal, el Planeta y el Nacional de Narrativa, además del Miguel Delibes de periodismo. Destacan sus novelas El desorden de tu nombre, El mundo o Que nadie duerma. Colaborador de diversos medios escritos y del programa A vivir, de la Cadena SER.

Fue ella quien le propuso que telefoneara al supuesto difunto para salir de dudas


Jamás se lo había contado a nadie y creo que ya me estoy arrepintiendo de habéroslo contado a vosotros


Necesito que se me aparezca un ángel para que me diga que todo está bien y que lo que está mal no depende de mí


El techo de los dormitorios y de las habitaciones de hotel tiene algo de pantalla de cine donde, a partir de cierta edad, el diablo proyecta tu vida


Somos forraje digerido en las entrañas de un cuadrúpedo, tierra metabolizada, somos sol transformado en carne

Con el discurso de Trump en la Asamblea General de la ONU queda homologado y alentado el delirio


¿Tenemos derecho a traer a alguien al mundo en diferido o en ‘playback’, no sé cómo llamarlo?


Descubrir la perfección en las cosas sencillas puede demostrar a los más escépticos que merece la pena vivir


Si no podemos regresar a la selva, dejemos al menos que la selva regrese a nosotros







Los ricos son más ricos, los pobres son más pobres, y ustedes, sufridos conciudadanos, confórmense con el espectáculo político de los miércoles


Estaba limpiándome los dientes cuando me salió una mariposa de la boca


Imaginé por un momento que podría volver invisibles a Putin, Trump, Netanyahu y demás ralea

El autor conversa con la IA sobre la reunión socialista: “Lo que le ha pasado al partido es lo que le ocurre al que se abanica en una habitación que arde”.

Los microplásticos que comemos, bebemos y respiramos ya invaden las células humanas y forman parte de nosotros

No importa donde fuera, allí estaba, observándome medio oculto desde algún lugar


¿A quién rayos se le ocurriría la idea del yo? Ser yo todo el rato es como una condena a cadena perpetua


La escritura no nació al servicio de la poesía, sino al del cálculo de los excedentes

Vivimos en una gran jaula semántica parecida a la de las grandes pajareras de los parques zoológicos


Solo se prohíbe lo evitable y se legisla lo que se puede controlar

Hay innumerables puertas monumentales, saturadas de simbolismo y encargadas de cerrar el paso, más que de facilitar el acceso, a los peatones de la historia