Los estafadores que roban las fotografías de los perfiles también estafan a otros usuarios mediante plataformas falsas que ofrecen contenido para adultos
Las redes sociales de la joven no están activas y la asociación de trabajadoras sexuales ha prestado las suyas para contribuir a su búsqueda
José Fernández-Pacheco tiene dos apellidos pero no necesita ninguno en televisión: entiende de diseño, de historia, de literatura y ahora, tras hacerse famoso gracias a ‘MasterChef’, acaricia proyectos mucho más ambiciosos.
Las pinacotecas de Viena, como el Albertina o el Leopold Museum, abren cuentas en la plataforma pornográfica para esquivar la censura de los cuadros con desnudos (y el control moral de los algoritmos) en las redes sociales
La noticia había sumido en el desconcierto a miles de creadores, que utilizan la plataforma para difundir contenido para adultos
El anuncio de la plataforma deja libre un mercado de miles de millones de euros que se había convertido en fuente de ingresos para cientos de miles de personas
La plataforma, que ha crecido exponencialmente durante la pandemia gracias sobre todo a los vídeos eróticos, permitirá sin embargo las imágenes de desnudos, dentro de unos límites aún por definir
En 2020, la red social pasó de 20 millones de usuarios a 120. Menos del 1% de ellos sube sus fotos y vídeos, generalmente eróticos y sexuales. El resto mira. Y paga. Es una de las plataformas que han roto los esquemas del porno. Un negocio que suscita dudas en un mundo precario para los jóvenes. ¿Es una puerta de entrada a la explotación sexual?