Júbilo internacional por el rescate

La noticia de la liberación de Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes de las FARC por parte del Ejército colombiano desató el júbilo internacional. Las llamadas de felicitación de mandatarios de todo el mundo al presidente de Colombia, Álvaro Uribe, se sucedían anoche sin parar. El francés Nicolas Sarkozy y el estadounidense George W. Bush hablaron largamente con su homólogo colombiano, al que expresaron su gratitud por la liberación de sus connacionales -Ingrid Betancourt tiene la doble nacionalidad franco-colombiana-. La Cámara francesa de Diputados acogió la noticia con una gran ovación.

El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Gordon Johndroe, explicó que Bush había llamado por teléfono a Uribe para felicitarlo por la liberación, que incluye a tres ciudadanos estadounidenses. "El presidente Bush felicitó al presidente Uribe y le señaló que es un líder fuerte", dijo Johndroe.

También los candidatos a suceder a Bush en la Casa Blanca se mostraron complacidos por la liberación de los rehenes. El republicano John McCain, quien concluyó el martes una visita a Colombia, señaló que estaba feliz por el éxito de la operación. "Es una gran noticia. Ahora debemos renovar nuestros esfuerzos para liberar a todos los otros rehenes inocentes", dijo en un comunicado. El demócrata Barack Obama manifestó su apoyo a la estrategia de Uribe de no hacer concesiones a las FARC.

El presidente del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, envió sendos telegramas de felicitación a Uribe y a los familiares de la ex candidata colombiana. Zapatero recordaba que Betancourt era "un símbolo de los rehenes" de Colombia.

El presidente boliviano, Evo Morales, y la argentina, Cristina Fernández, no dejaron de expresar su alegría por "una victoria de la vida y la libertad". La comisaria de Exteriores de la Unión Europea, Benita Ferrero-Waldner, dijo que sentía un "inmenso alivio" al saber que se había puesto fin "a la larga pesadilla de seis años sufrida por Betancourt" y por el resto de los secuestrados. "Espero que Ingrid se reúna pronto con su familia de manera que pueda reponerse rápidamente de la terrible prueba por la que ha atravesado", afirmó en un comunicado.

Por su parte, el Gobierno suizo, uno de los mediadores en la negociación sobre los secuestrados, afirmó en un comunicado: "Vamos a continuar nuestros esfuerzos para lograr la liberación de todos los rehenes, en la esperanza de que contribuyan a poner fin a este drama y a traer la paz a todos los colombianos".

El Vaticano se felicitó por la "buena noticia", que consideró "una señal positiva para la libertad de todos los rehenes y la reconciliación en Colombia".