Unas 3.000 personas -5.000, según la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona; 4.000, según la Guardia Urbana- se manifestaron ayer por el centro de la ciudad en solidaridad con los vecinos del Carmel cuyos pisos tienen graves problemas estructurales a causa de las obras del metro.
El barrio de la Estació de Sallent (Bages) está afectado en su totalidad por un lento proceso de hundimiento y existe un riesgo, no inminente, de colapso en el interior de la gran cavidad que se ha creado en una mina de potasa abandonada del subsuelo.
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BERNAT PUIGTOBELLA | Barcelona
Un debate en la Setmana del Llibre en Català enfrenta a Enric Casasses y Albert Roig con el colectivo de los Imparables