Cuestión de sentidos

Durante las Navidades que hoy concluyen, el televisor ha estado poblado de hombres que vuelven, mujeres que son una isla, galanes atontados que deambulan por la ciudad tras una noche de amor, tortazos femeninos que acaban en beso, adolescentes que se colorean, danzarines vestidos con camisa griega, aventureras en descapotable que buscan, encuentran y pierden a mozos rudos en el desierto... O de burbujas verdes y doradas, compases de La Traviata, oraciones e inscripciones gigantescas, sobre la arena, de una marca de cava. Y todos, detrás de un sustantivo sonoro y embotellado. Cuestión de pituitaria o de degustación.

Diciembre quema más de la mitad de la creciente inversión publicitaria anual que realizan los fabricantes de colonias y perfumes. En 1987 se gastaron más de 1.725 millones de pesetas en ese mes, sobre una inversión anual de casi 3.270 millones. Casi 1.000 millones más que en 1986, según datos facilitados por la empresa de estudios de mercado Nielsen Repress.Aunque destinan menos dinero a publicidad anual que los perfumes, los vinos espumosos concentran más su inversión durante las Navidades. Sus fabricantes gastaron en 1987 más de 2.044 millones de pesetas en promoción de estos productos. Alrededor del 807. de la inversión se realizó en diciembre, según Nielsen Repress. La televisión es el medio más utilizado en ambos casos. En 1987 los vinos espumosos invirtieron en la tele más de la mitad de sus recursos y los perfumes casi las tres cuartas partes de sus gastos publicitarios. En ese año se ofrecieron 58 anuncios distintos de colonias y perfumes en la primera cadena de televisión, que generaron 696 pases, según datos de la gerencia de publicidad de TVE.

Perfumes y cavas comparten un: interés en alza por la publicidad en sí misma. Las fórmulas que mantienen al espectador sujeto a su butaca, como el fichaje de: famosos de renombre internacional, ha conseguido que desde h2Lce unos años en los medios de comunicación más o menos rosados se siga la campaña anual de los cavas. Hace unos días se ha emitido un publirreportaje que narraba el rodaje del spot de la marca de cava Freixenet, líder en inversión publicitaria con 938 millones de pesetas, según el in forme de J. Walter Thompson de 1987. Durante un ensayo de La Traviata en el Liceo de Barcelona el tenor José Carreras reclama que se llene su copa. El creativo responsable de la campaña, Toni Guasch, de la agencia Tándem / DDB, cree que esta idea "incorpora más espectáculo al espectáculo". El rodaje del spot duró nueve días y ha generado escenas interesantes, según Guasch, como poder ver cómo se maquilló a Carreras, cómo éste grababa la banda sonora, o cómo Néstor Almendros, director de fotografía, manejaba la cámara.

Otro caso semejante es el del spot de Coco, de la casa Chanel. Una película de 10 minutos -difundida ya en la televisión de vanos países europeos- cuenta las anécdotas que acontecieron al equipo dirigido por Tony Scott (director de la película Top gun) durante el rodaje de Un oui pour un nom (Un sí para un nombre).

Un día negro

Inès de la Fressange, la mujer emblema de Chanel, es en la ficción, según Melinda Ruspoli, relaciones públicas de la firma, una dama moderna que vive un día negro: la detiene la policía cuando lleva a sus hijos al colegio, se rompe el tacón cuando, a carreras, llega tarde a una cita, y así hasta que termina el día acudiendo con retraso a la representación de una ópera de Wagner". En cada una de estas situaciones, la modelo responde con un modulado non. Finalmente, un guapísimo acompañante le coloca en la mano un frasco de Coco, a lo que la heroína responde con un victorioso oui! A través del publirreportaje, uno se entera de que Inés en la vida real está siempre de buen humor, y es, paradójicamente, puntualísima. Los 300 figurantes se enfadaron con su tardanza en la escena de la ópera, tan convencidos ellos de que todo era de verdad.

No falta algún anuncio valiente, que en prensa, "ha tenido problemas con alguna revista". Ignacio Buxaren se refiere a un anuncio, hecho en Italia, de la colonia de Giancarlo Ferré y que es distribuido por Mac Cann Erickson, agencia a la que él pertenece. Un hombre musculoso y desnudo, con las venas del tronco fuertemente marcadas, alarga su brazo hacia las nalgas de una mujer, quien, también desnuda, le abraza por detrás y sujeta en una mano el envase de la colonia.

El spot de Codorniú, realizado por Gianni Ruggiero, se ha rodado en varias ciudades españolas y europeas y se escribió el nombre de la firma en el Retiro, en Montjuïc y en La Concha de San Sebastián.

Según fuentes de la productora, una decena de personas trabajó durante toda la noche en la playa de San Sebastián para labra, la inscripción, de 800 metros cuadrados. Después de dos horas de grabación, -con helicóptero y todo- a las ocho de la mañana se suspendió porque el agua subía de nuevo.

El anuncio de Jazz (Yves Saint Laurent) ha ganado el León de Plata en el último Festival de Cine Publicitario de Cannes Una mujer canta una vieja me odía -Ce-ci-bon-, recreada por Trevor Hom y dos bailarines juegan con las semejanzas del blanco y negro, el jazz y las teclas del piano, las ideas que pretende aunar este producto para hombre, según Gloria Pujol, relacione, públicas de la firma.