El último concierto de Amnistía, homenaje a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo
El último concierto de la gira programada por Amnistía Internacional para reclamar la vigencia del lema Derechos humanos, ¡ya! se convirtió el sábado en Buenos Aires en un homenaje público a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, organizaciones que nacieron espontáneamente cuando los familiares de miles de ciudadanos secuestrados durante la dictadura militar decidieron exigir su aparición con vida.
Las 65.000 personas que colmaron el sábado el estadio de fútbol del River acompañaron a coro la canción Ellas danzan solas, interpretada por Sting y dedicada a las Madres. El cantante, en castellano, recordó que el año pasado, cuando estuvo en Buenos Aire, visitó la casa de las Madres y vio las fotografías de cientos de jóvenes y niños "bellísimos". Sting se preguntó: "¿Por qué la junta nos privó de ellos, por qué hoy América Latina no puede contar con sus talentos?".Una delegación de Madres con la cabeza cubierta por los tradicionales pañuelos blancos subió al escenario, y Sting bailó luego con cada una de ellas.
Jack Healey, ex monje franciscano, fue el principal organizador de la gira y admitió "el valor político" del concierto de Buenos Aires, "a pesar de que no convenía económicamente".
Los responsables de Amnistía, tuvieron en cuenta la importancia de un país, como Argentina, que sufrió tanto la violación de los derechos humanos en su pasado reciente. León Gieco, uno de los ídolos del rock argentino invitado a tocar en el concierto del sábado, advirtió en la conferencia de prensa sobre los riesgos que aún se corren aquí: "Nosotros vivimos en el corazón de la represión, con una pistola en la cabeza. Los que luchamos por la democracia vemos con tristeza que se ha sancionado la ley de obediencia debida y que los torturadores están sueltos. Graciela Daleo fue torturada en la Escuela de Mecánica de la Armada, luego testimonió contra las juntas militares y ahora está presa otra vez. Tengamos cuidado".
Gieco fue ovacionado el sábado cuando cantó, a petición de la multitud Sólo le pido a Dios, una canción que escribió después de la guerra de las Malvinas y que evoca el drama de los jóvenes argentinos durante la dictadura.
La repercusión política del concierto en la Prensa redujo a espacios mínimos la entrevista del presidente Raúl Alfonsín con Hortensia Bussi, la viuda de Salvador Allende, y el lanzamiento de la campaña electoral del peronismo, organizado el sábado en la provincia de La Rioja, donde nació y gobierna el candidato Carlos Menem.
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