El huevo de la serpiente
El Nobel colombiano demuesta una vez más que es un hombre apasionado que no conoce posiciones intermedias. Uno puede estar o no de acuerdo con sus opiniones sobre Allende y el sistema político anterior a la dictadura, pero no puede dudar de su afecto hacia Chile y los chilenos. Basta recordar su promesa de no volver a escribir mientras permaneciera la dictadura del general Pinochet..., que tuvo que romper al cabo de algunos años, para fortuna de sus lectores.Los juicios de García Márquez sobre la democracia chilena resultarán inaceptables para algunos. Pero si bien es cierto que Chile tuvo un sistema republicano ejemplar en comparación con otros países de América Latina, tampoco hay que olvidar que en esos 160 años no todo fue miel sobre hojuelas. Como prueba están los intentos de golpes de Estado desde comienzos de este siglo, los miles de trabajadores asesinados por reclamar sus legítimos derechos, la sucesión de Gobiernos autoritarios que abolieron los derechos de huelga, reunión, asociación, libertad de expresión, etcétera, la guerra civil de 1891; la absoluta marginación durante décadas de ciudadanos considerados de segunda y tercera categorías; la subordinación de los intereses nacionales a los de otros países. Un caso notable fue la imposición por parte de EE UU de un precio miserable para sus compras de cobre chileno durante la II Guerra Mundial. Y, más recientemente, la incapacidad de esa democracia de atender las demandas de educación, salud, vivienda, seguridad social, trabajo y participación. Hoy día, el dilema de las faerzas oporsitoras es construir un modelo institucional que no reproduzca las taras del pasado y que garantice la estabilidad política y el consense, democrático sobre la base de la participación de todos los sectores sociales y que no descanse sobre la injusticia y la explotación.
Por último, no quisiera dejar de mencionar un hecho que por obvio muchas veces se olvida. El fascismo chileno surgió justamente al amparo de ese sistema institucional jurídico y legal anterior a 1973. El huevo de la serpiente requiere un largo período de incubación. Figueroa P.
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