_
_
_
_
A los 40 años de la derrota nazi

Gorbachov arranca aplausos para Stalin en el Kremlin

Pilar Bonet

El líder soviético, Mijail Gorbachov, acusó ayer a EE UU de estimular el revanchismo en la RFA, de adoptar una política de "carácter cada vez más belicoso" y de convertirse en un "constante factor negativo en las relaciones internacionales". "El militarismo norteamericano está en las primeras filas de la amenaza bélica para la humanidad", dijo el dirigente en una sesión solemne celebrada en el Kremlin con motivo del 40º aniversario de la victoria sobre el nazismo, en la que destacaron los entusiastas aplausos que Gorbachov arrancó para la figura de Josif Stalin.

Más información
Solemne celebración en Francia
La delegación soviética
Discreta conmemoración británica como signo de reconciliacion
Oreja explica los planes contra las drogas y el terrorismo
El calvario de nunca acabar
Misiles SS-21, en el desfile de Praga
El Bundestag, escenario de las contradicciones de la RFA, a la hora de encarar su pasado
La izquierda europea abuchea las referencias de Reagan a Centroamerica y a la 'guerra de las galaxias'

Los embajadores occidentales acreditados en Moscú, incluidos los de EE UU y la RFA, participaron por la mañana en una ofrenda floral ante la tumba del soldado desconocido. Hoy se celebrará un desfile militar en la plaza Roja, al que se prevé la asistencia de todos los embajadores occidentales, con excepción del estadounidense, el de la República Federal de Alemania y el de Holanda. El desfile, ensayado repetidamente en las noches moscovitas, contará con la presencia de nuevos armamentos, entre ellos los cohetes SS-21, según afirman expertos militares occidentales.En su intervención de ayer, Gorbachov minimizó el papel de los aliados de la URSS durante la II Guerra Mundial y responsabilizó a los Estados occidentales de haber posibilitado el fortalecimiento de Hitler en los años treinta con la esperanza de que éste actuase contra la URSS.

Paralelamente, el líder soviético ensalzó la contribución de su país a la contienda y afirmó que el pueblo soviético había "salvado a la civilización mundial del fascismo". La participación de los Estados occidentales en la victoria no fue reconocida en su calidad de tales, sino en función de los combatientes considerados como grupos. Así, Gorbachov elogió a los soldados de EE UU, Reino Unido y Francia, a los comunistas alemanes, a los movimientos europeos de resistencia y a los antifascistas en general. El dirigente subrayó la participación de los partidos comunistas de Europa occidental.

La victoria, sin embargo, fue del Ejército rojo, según se desprendía del mensaje. "Se necesitó", dijo Gorbachov, "la brillante victoria del Ejército rojo para que el acuerdo de cooperación con el Estado soviético en la lucha contra el fascismo comenzará a encontrar una fuerza material palpable". La ayuda de los aliados fue escasa y tardía, señaló.

Críticas a 'los siete'

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Los líderes de los siete países industrializados celebraron a su manera el aniversario de la victoria, señaló Gorbachov, quien acusó a los siete participantes en la cumbre de Bonn de atentar contra el orden geográfico europeo surgido de la II Guerra Mundial. Aludiendo a la visita de Reagan el comentario de Bitburg, Gorbachov dijo que los líderes occidentales están dispuestos" a olvidar, justificar e incluso a honrar a los rufianes de las SS", lo que constituye una "ofensa a la memoria de la humanidad".

Gorbachov calificó de gigantesco el trabajo realizado bajo la dirección de Stalin "en el frente y en la retaguardia". El nombre de Stalin -pronunciado públicamente por primera vez por Gorbachov en un acto de asistencia masiva- fue acogido con la más larga ovación escuchada en la sala, que estaba repleta de veteranos militares que lucían cuantiosas condecoraciones. Gorbachov tuvo que empezar varias veces la siguiente frase para que le dejaran continuar. Tan sólo una alusión a las características que deben tener los cuadros del partido, donde se hizo mención de la modestia personal, pudo compararse en algo al entusiasmo suscitado por el nombre de Stalin.

Por otra parte, la agencia Tass comentó la intervención de Reagan en el Parlamento Europeo de Estrasburgo. Tass señaló que bajo la fórmula de reconciliación utilizada por el presidente se esconde el intento de EE UU de conseguir la superioridad militar.

Más conciliador era el contenido de un telegrama enviado por Gorbachov a Ronald Reagan. Según el texto facilitado por Tass, el líder del Kremlin recordaba "el espíritu de cooperación" que les unía "en la lucha contra el enemigo común" y reconoció la "aportación del pueblo norteamericano en la consecución de la victoria", además de asegurar que "la URSS está dispuesta a cooperar con Estados Unidos" para "evitar la catástrofe nuclear".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_