Solo esta semana la cantante, que acaba de ser coronada como una de las personas más estilosas del año por ‘The New York Times’, ha lucido dos vestidos lenceros (uno ‘vintage’ de Versace y otro de la firma china ShuShu/Tong). Esta prenda bebe de la inspiración noventera que empapa todo el guardarropa de la autora de ‘Drivers License’.
El actual clima de incertidumbre económica es otra excusa que da alas a una tendencia que viene pegando muy fuerte. Valor refugio donde los haya, el oro está de nuevo en el punto de mira de los compradores.
El diseñador de la firma italiana, un completo desconocido hace solo dos años, es favorito de nombres como Dua Lipa o Bad Gyal. Conquista con sus referencias, que elogian la nostalgia ‘dosmilera’.
En la moda -como en la vida- todo vuelve. Lo auguraban las pasarelas y el ‘streetstyle’ de las capitales de la moda lo ha confirmado: desde los clásicos calentadores de algodón hasta las versiones más extremas, estos diseños vestirán nuestros tobillos los próximos meses.
Se gestó en la década de los ochenta y pisó el asfalto en los 2000, alcanzando la cima de su popularidad. Ahora la moda de los calentadores regresa en versión renovada.
Dicen las leyes no escritas de la moda que 20 años es el tiempo que tiene que pasar para que una tendencia vuelva a resultar apetecible. Cumplido el plazo y aupadas por la estética Y2K, muchas firmas ‘dosmileras’ orquestan su regreso para conquistar ahora a la Generación Z.
La próxima gran tendencia en la moda no es un color, ni siquiera una prenda, sino un detalle mucho más significativo. Un bolsillo cuadrado y con fuelle que nació en las trincheras como algo práctico y que ha acabado siendo signo de distinción.
No sirve para sujetar el pantalón, pero sí como adorno. Tras meses en los que solo nos arreglábamos de cintura para arriba en las videollamadas, este complemento reclama su sitio.
Su nombre hace referencia al hilo dental. Finas tiras de tejido que se enroscan en el abdomen y recuperan algo de la estética Y2K (en algunos casos es inevitable que recuerde al tanga asomando). Se lucen de manera extrema, pero también adaptadas en prendas muy versátiles como camisas con detalles.
La obsesión por resucitar todo lo que pusieron de moda Paris Hilton, Britney Spears y compañía a principios del nuevo milenio invade las tendencias actuales y da nombre a un estilo que triunfa dentro y fuera de las redes sociales.