Catástrofes en Asia
Más de 10.000 personas murieron ayer en China cuando un terremoto de magnitud 7,8 en la escala de Richter sacudió el centro del país a las 14.28 (seis horas menos en la España peninsular). Fue el peor seísmo en más de 30 años. Miles de ciudadanos se echaron a la calle, presos del pánico, incluso en ciudades situadas a más de mil kilómetros del epicentro, como Pekín o Shanghai.
"Estaba dando clases, cuando todo comenzó a temblar. Al principio, un poco; luego, mucho. Salimos corriendo al patio de la universidad. No nos dejaron volver a clase ni a nuestras casas, y las clases fueron suspendidas. Estuvimos esperando varias horas al aire libre.
Rumania criticó ayer abiertamente al Gobierno italiano por su anunciado plan de choque contra la inmigración ilegal y dejó ver su disgusto por las medidas previstas contra los ciudadanos rumanos.
La Serbia democrática y proeuropea dispone de una nueva oportunidad, la segunda desde la caída de Slobodan Milosevic en octubre de 2000. La primera acabó con el asesinato en 2003 del primer ministro Zoran Djindjic.
La composición del nuevo Gabinete ruso, que quedó definida ayer, confirma que habrá continuidad en la política que aplicará Vladímir Putin como jefe de Gobierno. El presidente, Dmitri Medvédev, firmó ayer los decretos de los nombramientos de los nuevos ministros, la mayoría de los cuales conservan su puesto.
El primer ministro libanés, Fuad Siniora, permanece encerrado en el Serrallo de Beirut, sede del Ejecutivo. Los líderes que le respaldan, el suní Saad Hariri y el druso Walid Yumblat, se refugian en sus mansiones, protegidos por decenas de soldados y tanquetas.