En el túnel de la M-30 que discurre entre Legazpi y el Vicente Calderón, cuya cinta inaugural se cortó el lunes 19, al menos siete de sus 22 salidas de emergencia a la calle no están terminadas, según comprobó EL PAÍS el martes pasado. No funcionan los sistemas de apertura automática, de modo que están siempre abiertos y vigilados por un obrero.
Dos enfermos ingresados en camas en pasillos y zonas de paso de las urgencias del hospital de La Paz murieron en la madrugada del miércoles rodeados de otros (entre ellos, una enferma que pasó cuatro días esperando el diagnóstico de cuatro costillas rotas). Los trabajadores denuncian que "cada día hay entre 30 y 40 enfermos en camas en los pasillos".
BEATRIZ PORTINARI | Madrid
El festival Teatralia comienza hoy con 39 espectáculos para niños y jóvenes