Uno de cada cuatro niños sobrevive en familias que ingresan sólo un euro al día

Aunque la situación de los niños en el mundo (el 36% de la población) ha mejorado en los últimos 10 años, uno de cada cuatro sobrevive en condiciones de extrema pobreza, en familias que no ingresan al día más de un euro, según datos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que pasado mañana inicia en Nueva York una cumbre sobre los menores. Los niños están sobre todo amenazados por el sida (12 millones de ellos lo padecen), las guerras (hay al menos 300.000 menores soldados), los abusos sexuales y laborales y la falta de escolarización.

Los niños de hoy, si se establecen comparaciones con los de hace un decenio, han experimentado en conjunto ciertas mejoras: están más escolarizados, sobre todo en Latinoamérica; corren menos peligro de contraer enfermedades que antaño constituían una terrible amenaza, como la poliomielitis, e incluso las consecuencias del sarampión no son tan graves: además, se han reducido los niveles mundiales de malnutrición. Pero la situación que analizará la Cumbre de la Infancia no deja de ser sombría, sobre todo por las repercusiones del sida y el hecho de que los menores sufren de forma directa, con las mujeres, el horror de los conflictos armados.

Hay en el mundo 2.100 millones de niños, y al año nacen 132 millones, la mitad en Asia. Uno de cada cuatro sobrevive en la más absoluta pobreza, en familias cuyos ingresos no superan un euro por día. Si las condiciones no cambian, el 17% (sobre todo las chicas) nunca pisará una escuela y el 30% seguirá sufriendo severos problemas de malnutrición. Las niñas sufren en mucho mayor grado la desescolarización a partir de la primaria.

Unicef ha concentrado sus metas en cuatro apartados: combatir el sida, proteger a los niños de los abusos y la violencia, mejorar la educación y promover una vida sana.

- Sida. La epidemia ha creado 13 millones de huérfanos. Unicef se ha impuesto reducir la proporción de niños infectados en un 20% para 2005, a través de programas nacionales que mejoren la información de las madres y luchen contra el estigma de las víctimas. No es fácil. En muchas naciones africanas o asiáticas se cree que mantener relaciones sexuales con una virgen cura el sida y rejuvenece, mito que también justifica la explotación sexual. Casi 18.000 menores ejercen la prostitución en Tailandia, la mitad en Laos y en Vietnam. 'En Zambia, el impacto del sida se nota en toda la estructura familiar', dice Estella Goins, representante de Unicef en ese país. 'El 75% de los hogares tiene que ocuparse de un enfermo. Conozco el caso de Julie, con marido y dos hijos, todos sanos, pero que debe ocuparse de los 13 niños que han dejado sus tres hermanos muertos. Eso le supone quedarse en la pobreza y dejar a sus propios hijos sin escuela. En Zambia, el 15% de los niños está infectado y el 80% de la población vive con menos de un euro al día'.

- Abusos y violencia. Las guerras han creado 20 millones de niños refugiados. Más de 100 millones viven atrapados en la explotación. Hay 300.000 niños soldado, 75.000 en África, sobre todo Ruanda, Burundi, Uganda o Sudán, donde se emplean como porteadores o directamente de carne de cañón. 'En la República Democrática del Congo, el Gobierno ha desmovilizado a 130.000 niños, que están en centros de readaptación', explica Rima Salah, directora de Unicef para África Occidental.

- Educación. Mejorarla es una de las metas personales de la directora de Unicef, Carol Bellamy. Las disparidades siguen siendo muy grandes entre chicos y chicas, algo que la organización espera poder igualar en el 2015. Ciento veinte millones siguen sin educación primaria.

- Planificación familiar. Es tema de debate sobre todo para el principal contribuyente, Estados Unidos. Pero los anticonceptivos se han duplicado en los países en desarrollo en la última década, aunque siguen naciendo al año 13 millones de niños de madres adolescentes (un millón en Estados Unidos).

- Salud. Sin acceso a servicios sanitarios básicos, más de 10 millones de niños de menos de cinco años mueren cada año por causas evitables y 150 millones padecen malnutrición. Unicef quiere transformar la mortalidad materna y de los neonatos en las prioridades de los sistemas de salud.