Un juez argentino ordena el arresto de un ex general por robo de niños

El general argentino retirado Santiago Omar Riveros, quedó detenido ayer en prisión preventiva después de declarar ante el juez federal Adolfo Bagnasco por su presunta relación con el secuestro de niños en la dictadura. Riveros permanece desde anoche bajo vigilancia en su domicilio, beneficio que le concede la ley a los mayores de 70 años. El juez Bagnasco retomó ayer el proceso después de que la Corte Suprema decidiera a favor de la justicia civil en el conflicto de competencia planteado por el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que reclamaba el expediente para que la investigación quede a cargo de la justicia militar. Los abogados de Riveros -el general responsable de las maternidades clandestinas que funcionaron en la guarnición de Campo de Mayo y en los Institutos Militares, donde daban a luz la mayoría de las mujeres secuestradas en estado de gestación que luego eran torturadas y asesinadas- negaron la práctica sistemática del "robo de bebes" y aseguran que "más de 200 chicos, hijos de desaparecidos, fueron entregados por las fuerzas armadas a los familiares o a las autoridades del Estado". Riveros había acusado también de "parcial" al juez Bagnasco "por su identificación ideológica con los subversivos de ayer".