Alarma por el escaso apoyo a la ciencia básica

El escaso esfuerzo de España en I+D preocupa mucho a los científicos. Pero además, en los últimos años, los investigadores españoles aprecian una tendencia al abandono, o congelación, del apoyo a la ciencia básica, lo que supone, advierten, un gran riesgo de retroceder en el nivel científico adquirido, con grave repercusión en los ámbitos tecnológico y económico."La ciencia básica desempeña un papel fundamental en la tecnología punta en todos los campos: en nuevos materiales, en telecomunicaciones, en energía... y vemos con mucha preocupación el hecho de que en España haya una cierta adoración por la ciencia aplicada junto a un no aprecio por la ciencia básica", comenta Gerardo Delgado, investigador del CSIC y presidente de la Real Sociedad Española de Física. "En una reciente reunión de las sociedades europeas de física hemos abordado el equilibrio entre ciencia básica y ciencia aplicada; para un país renunciar a la ciencia básica, o no tener una aportación importante en ella, supone quedarse totalmente descolgado de la posibilidad de desarrollar tecnología punta", comenta.

Ginés Morata, investigador del CSIC en una de las ramas científicas en que la ciencia española se ha ganado mayor prestigio internacional, la biología del desarrollo, argumenta contundentemente a favor de la ciencia básica: "Todas las grandes aplicaciones de la biología, con un enorme impacto social, como la ingeniería genética, la terapia génica, los organismos transgénicos, el genoma humano.... todo esto viene de la ciencia básica, del conocimiento profundo de los organismos; y lo mismo pasa con la física". Morata recuerda, por ejemplo, que los anticuerpos monoclonales o los sistemas de ADN recombinante no surgen en los laboratorios con pretensiones de aplicación. "Todo esto procede de inversiones públicas en ciencia básica; los Gobiernos tienen que apoyar la ciencia de calidad, y luego ésta repercutirá en las aplicaciones", dice Morata. Y en España, puntualiza, se está poniendo el énfasis del esfuerzo científico en la aplicación tecnológica, algo que, "sobre todo, corresponde a la empresa".

Para Ramón Canal, catedrático de Astrofísica de la Universidad de Barcelona, la ciencia básica en España "es la cenicienta". Canal denuncia recortes drásticos en proyectos de investigación de hasta un 40% respecto a lo que los grupos científicos recibían hace seis o siete años "porque hay más proyectos y los fondos se han congelado". "La corriente que se ha impuesto de incentivar la investigación aplicada es simplemente una manera encubierta de decir que hay que dar subvenciones a las industrias de los amigos", afirma Canal. Destaca también como grave problema la escasez de becas para jóvenes investigadores. Morata hace hincapié en la sangría que supone para la ciencia española la falta de salidas profesionales para jóvenes investigadores de alta formación.

"En los últimos 15 años, la ciencia española ha dado un considerable salto adelante, sobre todo en ciencia básica, debido a la inversión que hubo en los ochenta", dice Morata. "Ese esfuerzo ha ido disminuyendo, y no creo que se deba culpar sólo al Gobierno actual porque el declive comenzó en la última etapa de gobierno socialista".